Sepultura -The Mediator Between Head And Hands Must Be The Heart (2013)



Sepultura -The Mediator Between Head And Hands Must Be The Heart (2013)

A estas alturas sería complejo afirmar que Sepultura es una banda brasileña, ya con la salida de los dos hermanos Cavalera y con la inclusión de Derrick Green se le ha dado a la banda un aire cosmopolita que el nuevo baterista Eloy Casagrande no puede diluir, Andreas Kisser y Paulo Jr., guitarra y bajo de la banda, respectivamente, los únicos sobrevivientes de la gran alineación que grabara los clásicos Beneath The Remanins, Arise, siguen en pie de lucha, re inventándose y creando nuevo material para la banda, que si bien, pareciera estar empeñada (al igual que Max Cavalera y sus Soulfly) en recrear la época del Chaos AD, que en que su brutalidad mestiza encontró un nicho que les puso firmes en el mapa del metal extremo a nivel mundial, la banda parece no poder ver más allá de esta meta y esto termina limitándolos, quitándoles espacio para crecer, y esto es algo que nuevamente genera descontento en el material de estos músicos pesados, pareciera que la ambición de aquellos primeros discos ha quedado muy atrás, (aunque esos discos conceptuales basados en la Divina Comedia y en la Naranja Mecánica muestran algo de luz, sin acabar de aterrizar las ideas) y la única ambición actual de estos cuatro es hacer el mayor estruendo posible.

Y si es así, este disco es un éxito para Sepultura, Trauma Of War posee una leve introducción que no dice mucho, tal vez una añoranza a las húmedas selvas del Brasil, interrumpida por un atronador sonido que nos pone de lleno ya en el disco con la descarga a todo lo que da, un tremendo trabajo de Paulo Jr. manteniendo la intensidad y un trabajo retador para Casagrande que se las arregla para sacar adelante, poseedor de velocidad, pero carente hasta cierto punto del poder pulverizante del buen Igor Cavalera, Kisser mientras tanto sigue avanzando en el departamento correspondiente a las guitarras introduciendo siempre alguna novedad en el sonido, inspirado por momentos en los devaneos y convulsiones de jazz extremos del legendario Piggy de los Voivod, añadiendo un pequeño toque de técnica a algo en dónde lo primitivo y salvaje prevalece.  

Y precisamente, esta vez Sepultura se niega a suavizar o estilizar su sonido, abre una puerta de acceso a pura brutalidad desmesurada, elimina elementos del llamado groove o nu metal, del death metal y a veces hasta del thrash, con un Green empujándolos más allá de los mundos del speed metal o del ya mencionado nu metal que alguna vez parecieron acercarse a describirlos, el hardcore pareciera ser la dirección en boga, posiblemente buscando acercarse a la escena deathcore, Green destroza su garganta sin piedad, y el resto le sigue de manera fiel, convencidos del ataque singular de este gigante estadohundidense que les ha inyectado nueva vida, The Vatican nuevamente lleva su introducción, algo que corta un poco el ritmo, pero que de alguna manera busca darle un fondo a las hostilidades, una razón de ser, precisamente este tema rescata mucho del sonido de la banda en el legendario Chaos AD, tanto que simplemente suena a reciclaje de temas y pasajes, aún y que Casagrande aplique un ritmo hardcore ultra veloz.

El fallo más grande de los actuales Sepultura deriva mucho de su falta de identidad, como lo comentábamos en un principio, que si bien en el pasado les ayudo, hoy les perjudica, en sus inicios en el ámbito mundial la banda no se terminaba de definir entre el death metal y el thrash, aprovechando esta ambigüedad para engrosar su legión de seguidores, después la explotaron aliándose nuevamente a bandas emergentes del genero nu metal como Korn o los Defttones, a la salida de los Cavalera, esa ambigüedad pareció voltearse en su contra al haberse esfumado al parecer su legión original de seguidores, en lo particular les seguí vehementemente a la banda hasta el Arise, después sólo esporádicamente, y precisamente al día de hoy este The Mediator Between Head And Hands Must Be The Heart (basado en la cinta Metrópolis) pareciera sufrir de esa falta de dirección y visión, es un impresionante estallido de energía, pero no se enfoca mucho a algo con una identidad propia, obviamente los sepultura suenan faltos de esencia, y aquí pareciera que Max Cavalera pareciera estar más cerca en estos momentos con sus Soulfly, que Kisser y Paulo, no minimizo piezas de mortífera artillería pesada como Impending Doom, para la cual cualquier enorme bocina podría resultar insuficiente para replicar el masivo sonido que consiguen producir, esto hasta que Green les pierde nuevamente en el limbo, Manipulation Of Tragedy también muestra buenas ideas, permite a Casagrande (como también hace en The Bliss Of Ignorance) lucirse y darse a conocer, pero al final no es nada nuevo o significativo, aún los Pestilence que han navegado por este tipo de aguas han sabido distinguirse de los otros miles de grupos que intentan este indefinido estilo, pero a pesar del volumen extremo, la banda nunca acaba por definirse del todo, Tsunami se pierde en riffs y secuencias sin mucho sentido, el rescatar algunos motivos nativos de Brasil por momentos trae la idea de que la banda no ha abandonado del todo algo de la original exhuberancia del Roots, aunque para muchos seguidores de antaño resultará un sacrilegio cualquier guiño a ese disco tan odiado/gustado, lamentablemente Sepultura ya no es Sepultura y no hay nada que haga particularmente especial a la banda en este movimiento, parte de su carisma, ambición y arrastre se lo llevó para siempre para bien o para mal Max, y simplemente Kisser o Paulo Jr no son capaces de reproducir estos atributos de manera tan eficiente, dejando este disco, a pesar de su concepto, en un intento amateur por reconciliarse con escenas más actuales, nos quedamos con el de Soulfly en esta ocasión. 

   

Comments

  1. Comparto tu crítica. Lo de Soulfly y Sepultura a estas alturas me está pareciendo patético. Ambos se olvidaron por completo de la evolución de su sonido y ya llevan varios discos compitiendo por quien suena más brutal y quien se acerca más al sonido del viejo Sepultura.

    A mi me gustó mucho lo que hicieron en "Dante" y "A-Lex" , dos álbumes que me parece daban buenas señales con respecto a la evolución de este nuevo Sepultura. Hoy, sin Igor, el asunto se limita cada vez más. "Kairos" y este "The mediator between..." funcionan en la misma linea, una que parece competir todo el tiempo con el pasado.

    Saludos
    Esteban
    http://politomusica.blogspot.com

    ReplyDelete

Post a Comment

Popular Posts