Exhuma: Feng Shui para Luchar Contra Demonios Japoneses en Corea del Sur



Más un drama sobrenatural que una película de terror. Exhuma "vuela" para convertirse en la película más exitosa de Corea del Sur desde Parasite.

En el fascinante mundo del cine, a menudo nos encontramos con historias que desafían nuestra percepción de lo sobrenatural y lo esotérico. Una de estas joyas cinematográficas es "Exhuma" (conocida como Pamyo en su título original), dirigida por el talentoso Jang Jae-hyun y protagonizada por el icónico Cho Min-sik, reconocido por su papel en la impactante "Oldboy". Esta película surcoreana no solo entretiene, sino que también nos sumerge en un viaje inquietante hacia el pasado tumultuoso de Corea del Sur durante la ocupación japonesa.

En el corazón de esta trama se encuentra el feng shui, una práctica ancestral china que, según se dice, tiene el poder de armonizar energías para proteger a los individuos y su entorno. Aunque inicialmente escéptico de estas prácticas, "Exhuma" me sorprendió al explorar el feng shui de una manera que va más allá de lo superficial, convirtiéndolo en un elemento esencial para combatir fuerzas oscuras.

La historia se desarrolla en un contexto donde lo sobrenatural y lo histórico se entrelazan de manera magistral. Tomando como base del argumento el periodo de ocupación japonesa, la trama gira en torno a la lucha de un maestro de feng shui contra un demonio japonés que yace enterrado bajo tierras coreanas. Es un enfoque audaz y único que, aunque requiere cierto conocimiento del folclore y las tradiciones de la región, cautiva visualmente con su riqueza cultural y su narrativa intrincada.

Jang Jae-hyun no solo dirige, sino que también nos sumerge en un mundo visualmente impresionante donde cada escena está meticulosamente diseñada para transmitir la esencia de las creencias y rituales místicos. Desde los exhumaciones hasta los conflictos geopolíticos, cada elemento de la película está cuidadosamente entrelazado para crear una experiencia cinematográfica que desafía las expectativas y deja una impresión duradera en el espectador.

Aunque reconozco que, algunos momentos de la trama pueden resultar confusos para quienes no están familiarizados con el folclore asiático, "Exhuma" logra trascender las barreras culturales para ofrecer una experiencia cinematográfica rica y profundamente emotiva. Al igual que "Midsommar" de Ari Aster, que exploró el folclore escandinavo, esta película utiliza el poder de las leyendas surcoreanas y japonesas para tejer una historia de venganza y maldiciones que captura la imaginación y el corazón.

"Exhuma" no es simplemente una película de terror más, sino un viaje fascinante a través de las complejidades del feng shui y el folclore asiático. Invita al espectador a sumergirse en un universo donde lo sobrenatural se entrelaza con lo histórico, creando una experiencia cinematográfica que no solo entretiene, sino que también educa y emociona. Es una obra maestra que promete asegurarse un lugar destacado en el panteón del cine de terror global, desafiando expectativas y dejando una huella indeleble en aquellos que se aventuran a verla.

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