Roky Erickson: Alma de la Psicodelia

El legendario pionero de la música psicodelica de los 60s.

Roky Erickson, nacido como Roger Kynard Erickson el 15 de julio de 1947 en Dallas, Texas, es una figura fundamental en la historia de la música psicodélica. Desde su adolescencia, Roky mostró una pasión ardiente por la música, tocando la guitarra y componiendo canciones influenciadas por el rock and roll y el blues. A los 18 años, ya había dejado su huella en varias bandas locales. Sin embargo, su destino cambió radicalmente al unirse a The Spades, un grupo de rock en Austin. Durante este tiempo, Erickson escribió y grabó "You're Gonna Miss Me", una canción que se convertiría en un éxito significativo con su banda más famosa, los legendarios 13th Floor Elevators.

Formados en 1965, los 13th Floor Elevators rápidamente se convirtieron en pioneros del rock psicodélico. Liderados por Erickson y el innovador Tommy Hall, quien tocaba una peculiar jarra amplificada, la banda creó un sonido único que fusionaba el rock con elementos psicodélicos, utilizando efectos de reverberación y eco. Su álbum debut, The Psychedelic Sounds of the 13th Floor Elevators de 1966, es considerado uno de los primeros y más influyentes discos de rock psicodélico. Canciones como "You're Gonna Miss Me" y "Reverberation" capturaron la esencia de la contracultura de la época, marcando el comienzo de una nueva era en la música.

El papel de Erickson en la música psicodélica de finales de los 60 es innegable. Su voz poderosa y desgarradora, combinada con su estilo de composición introspectivo y a menudo oscuro, ayudó a definir el género. Con su segundo álbum, Easter Everywhere en 1967, los 13th Floor Elevators consolidaron su estatus como pioneros del rock psicodélico. Temas como "Slip Inside This House" y "Levitation" demostraron su capacidad para explorar nuevos territorios sonoros y líricos. Sin embargo, la vida personal y profesional de Erickson comenzó a desmoronarse debido a problemas legales y su creciente uso de drogas.

Tras la disolución de los 13th Floor Elevators a finales de los años 60, Erickson enfrentó numerosos desafíos personales. Fue arrestado por posesión de marihuana en 1969 y, para evitar la prisión, optó por declararse mentalmente incompetente, lo que resultó en su internamiento en un hospital psiquiátrico durante tres años. Durante este tiempo, fue sometido a tratamientos controvertidos, como la terapia electroconvulsiva, que afectaron profundamente su salud mental. A pesar de estos desafíos, su pasión por la música nunca disminuyó.

En las décadas de los 70 y 80, Erickson continuó su carrera como solista, produciendo una serie de álbumes que reflejaban su amor por el rock, el blues y el horror. Su álbum The Evil One de 1981 es considerado una obra maestra del rock gótico y del horror, con canciones como "Two Headed Dog (Red Temple Prayer)" y "I Walked With a Zombie". A pesar de sus luchas personales, la música de Erickson seguía siendo poderosa e innovadora, ganando una base de seguidores leales y respeto dentro de la industria musical.

La vida de Erickson estuvo marcada por continuas dificultades, incluyendo problemas de salud mental y pobreza. Sin embargo, el reconocimiento de su talento nunca desapareció. En las décadas de los 90 y 2000, varios músicos y admiradores se unieron para ayudarlo, resultando en un resurgimiento de su carrera. En 2005, se lanzó el documental You're Gonna Miss Me, que narraba su vida y desafíos, generando un renovado interés en su música y legado. Erickson también comenzó a realizar presentaciones en vivo nuevamente, demostrando que su talento y energía estaban intactos.

Roky Erickson falleció el 31 de mayo de 2019, dejando atrás un legado impresionante y una influencia duradera en la música psicodélica y el rock en general. Su carrera, marcada por innovaciones musicales y luchas personales, es un testimonio de su resiliencia y creatividad. Erickson no solo ayudó a definir el sonido de una era, sino que también inspiró a generaciones de músicos y fanáticos. Su música continúa siendo celebrada y su impacto perdura, asegurando que Roky Erickson sea recordado como una figura icónica y trascendental en la historia del rock.