Mujeres al Borde... de Dominar la TV: El Legado Oculto de Almodóvar en EE.UU.



El impacto de Pedro Almodóvar en el cine es indiscutible, pero lo que muchos pasan por alto es su sutil, aunque profunda, influencia en la televisión estadounidense. Este director, maestro de la comedia screwball, combina humor absurdo con una estética vibrante y personajes femeninos complejos. Almodóvar no solo marcó a varias generaciones de cinéfilos, sino que también dejó una huella imborrable en series como Desperate Housewives, Weeds, Orange is the New Black, Big Little Lies y GLOW. Cada una de ellas bebió de su estilo narrativo único y del innovador tratamiento de las protagonistas femeninas, abrazando el humor negro como un vehículo para historias cargadas de emociones intensas.

Almodóvar ganó notoriedad internacional con Mujeres al Borde de un Ataque de Nervios (1988), una película que encapsula su sello personal: mujeres al límite, diálogos rápidos y situaciones absurdas que se resuelven de manera impredecible. Aquí, tomó elementos clásicos de la screwball comedy—caracterizada por el caos y las relaciones románticas inverosímiles—y los adaptó al contexto español. Esa fusión fresca llamó la atención de creadores alrededor del mundo, especialmente en la televisión estadounidense, donde series icónicas siguieron su ejemplo.

Las famosas "Chicas Almodóvar", actrices como Carmen Maura, Victoria Abril y Penélope Cruz, no solo protagonizaron sus películas, sino que dieron vida a mujeres poderosas, vulnerables y profundamente humanas. En ellas, Almodóvar exploraba temas como la identidad y el deseo, pero siempre con una dosis de humor. Este enfoque fue crucial para directores como Marc Cherry y Jenji Kohan, quienes vieron en esas mujeres una forma nueva y cautivadora de contar historias en la televisión.

Desperate Housewives (2004-2012), creada por Marc Cherry, es quizás el ejemplo más claro. Al igual que en Mujeres al Borde de un Ataque de Nervios, las protagonistas lidian con secretos, traiciones y caos emocional, pero todo se presenta de manera ligera y cómica. Cherry ha admitido que la película de Almodóvar fue una de sus principales fuentes de inspiración, y eso se nota en cada giro argumental.

Jenji Kohan también bebió del cine de Almodóvar al crear Weeds (2005-2012). La protagonista, Nancy Botwin, es una madre suburbana que se ve obligada a vender marihuana tras la muerte de su esposo. Su habilidad para enfrentar el desastre con humor negro recuerda a las heroínas de Almodóvar: ingeniosas, desafiantes y siempre al borde del colapso, pero con una sonrisa.

Orange is the New Black (2013-2019), también de Kohan, va un paso más allá. Aunque situada en una prisión de mujeres, la serie explora la vida emocional de sus protagonistas de una manera que resuena con el cine del director manchego. Las reclusas son complejas, oscilando entre lo trágico y lo cómico, mientras lidian con sus demonios internos. La diversidad de personajes y su capacidad para mantener la normalidad en situaciones extremas es una marca registrada de Almodóvar.

Otro ejemplo es Big Little Lies (2017-2019), creada por David E. Kelley. Aunque más dramática que las anteriores, la serie sigue a mujeres que lidian con secretos oscuros en una comunidad aparentemente perfecta. Aquí, las tensiones emocionales y el humor negro recuerdan al tono de las películas de Almodóvar, donde lo serio y lo absurdo se entrelazan para crear una narrativa cautivadora.

Por su parte, GLOW (2017-2019) captura la estética colorida y el caos de los personajes femeninos que Almodóvar perfeccionó. Situada en la década de 1980, la serie sigue a mujeres luchadoras que, como en Mujeres al Borde de un Ataque de Nervios, encuentran empoderamiento en medio del caos. El uso del humor, combinado con las luchas personales y profesionales de las protagonistas, refleja el enfoque del director español.

Almodóvar no solo influyó en los personajes, sino también en el diseño visual de estas series. Su uso audaz del color y la estilización se puede ver en Desperate Housewives y GLOW, donde las paletas vibrantes crean un escenario donde lo surrealista y lo real conviven sin esfuerzo. Además, el humor negro es otro de sus sellos distintivos. Temas difíciles como la muerte y la traición se convierten en motores narrativos, uniendo drama y comedia de manera natural.

Es fascinante cómo la influencia de Almodóvar cambió la forma en que las mujeres son representadas en la televisión. Antes, las protagonistas femeninas a menudo eran personajes secundarios, simples arquetipos. Hoy, gracias a su enfoque, las mujeres son imperfectas, divertidas y fuertes, protagonistas activas en sus propias historias. Cada una de estas series ha adoptado elementos del cine de Almodóvar, desde su visión estética hasta la profundidad emocional de sus personajes.

Almodóvar no solo transformó el cine con su estilo irreverente, sino que su influencia sigue viva en las series más icónicas de la televisión estadounidense. Series como Desperate Housewives, Weeds y GLOW no serían lo que son sin la huella que dejó este director. La televisión nunca volvió a ser la misma, y mucho menos la forma en que se cuenta la historia de las mujeres.


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