Sam Sulek: De Influencer a Profesional en Tiempo Récord

A los 23 años, ya había ganado una cantidad considerable de masa muscular. Entrenaba al estilo de Dorian Yates y Mike Mentzer: alta intensidad, pesos pesados y sesiones cortas. Crecía a un ritmo tan acelerado que cuando conseguí mi primer trabajo, encontrar un traje a mi medida fue una pesadilla. Mi madre insistía en que estaba gordo y que eso terminaría afectando mi salud. Así que ajusté mi alimentación, reduje los carbohidratos y esculpí mi físico sin perder músculo. Recuerdo su asombro cuando, en cuestión de semanas, mi cuerpo reveló lo que realmente había construido bajo esa capa de grasa.

Sam Sulek me ha sorprendido dos veces en un lapso ridículamente corto. Lo vi en redes muchas veces, acumulando millones de vistas con su tamaño colosal. Me parecía otro influencer más, una sensación de internet con carisma y músculos, pero sin intención de competir. Y en ese sentido, marcó una tendencia: otros influencers también empezaron a ganar popularidad sin necesidad de subirse a un escenario. Si Sulek podía ser un fenómeno sin competir, ¿por qué ellos no?

Pero entonces, Sulek tomó una decisión que pocos esperaban. Con 23 años, dejó la comodidad de las redes y decidió medirse contra verdaderos competidores en el escenario. Si Chris Bumstead—el legendario CBUM—se atrevió a desafiar la categoría Open, ¿por qué Sulek no iba a tener el valor de salir de su zona de confort y enfrentarse cara a cara con otros atletas?

Lo vi en tarima y noté que había perdido volumen. Pero lo que mostró fue un físico más refinado, con líneas clásicas que lo acercaban más a CBUM que a los mass monsters al estilo de Dorian Yates. Honestamente, esperaba que Sulek apostara por el tamaño descomunal, pero su elección fue otra y me ha parecido acertada: Classic Physique.

En febrero, debutó en un show amateur y arrasó con el título absoluto. El rey de los influencers de gimnasio había abandonado la virtualidad para competir en el mundo real… y lo hizo con éxito. Confieso que me sentí algo decepcionado. Esperaba verlo enorme, monstruoso. Pero, aunque Sulek parece decidido a seguir el camino de CBUM, aún tiene un largo trayecto por recorrer.

Y justo cuando pensé que lo habíamos visto todo, Sulek lo hizo otra vez. Apenas una semana después de su victoria amateur, compitió en su primer show para convertirse en profesional … y ganó. En el mismísimo Arnold Classic amateur. Así, en cuestión de días, pasó de ser un influencer a convertirse en un atleta profesional.

Voy a ser honesto: no esperaba verlo clasificado como profesional tan rápido. Su físico sigue siendo impresionante, aunque ya no es el mismo Sulek masivo de antes. Y eso abre un debate interesante: su ascenso meteórico no es solo un triunfo personal, sino una señal de cambio en la industria del bodybuilding. Sulek ha demostrado que el estigma del "influencer de gimnasio" es una tontería. Muchos creían que los creadores de contenido eran solo entretenimiento vacío, pero aquí está Sulek, demostrando que algunos realmente pueden competir.

Celebro su éxito y su determinación de seguir su propio camino. No me sorprendería verlo en el Mr. Olympia Classic Physique en unos años. Si logra que más jóvenes se interesen en el bodybuilding y llenen los gimnasios, como Jake Paul ha hecho con el box entonces bienvenido sea. Porque lo que el bodybuilding necesita ahora no es solo músculo, sino figuras que lo hagan más accesible y atractivo para nuevas generaciones.

El fitness está cambiando. Y Sam Sulek, para bien o para mal, es parte de ese cambio.