La Nueva Jugada
La Nueva Jugada
Por:
Erreh Svaia
“La
gente nunca miente tanto como después de una cacería, durante una guerra o
antes de una elección.”
Otto
Von Bismarck
Que a nadie le sorprenda que el PRI Gobierno haya
operado el aumento a las gasolinas argumentando que de no hacerlo estarían en
peligro programas sociales, que a nadie le extrañe que la COPARMEX haya pedido
a cambio de firmar el más reciente acuerdo presentado por el gobierno, el censo
minucioso de los beneficiarios de los programas sociales del gobierno y es que
estamos prácticamente con dos eventos electorales mayúsculas, este año las
elecciones de gobierno en el Estado de México, Coahuila y Nayarit y el próximo
año las elecciones presidenciales, no debe ponerse en duda la prioridad que el
PRI Gobierno otorgará a esos eventos y no de dudarse que parte de estos
recursos a obtenerse a costa de los aumentos irán a la alcancía que el gobierno
ha destinado para su maquinaria electoral, en pocas palabras, para la compra de
votantes y de votos, la vieja tradición nefasta del PRI y de otros partidos
principalmente de izquierda con "amplias bases sociales" de traficar
ciertos beneficios a cierto a grupos a cambio del favor electoral.
El Estado de México al igual que Coahuila representan
un punto importante en la agenda política del país, dos entidades que no han
conocido otro gobierno que no sea el del PRI, con un Estado de México como
corazón del PRIíismo y hogar del poderoso Grupo Atlacomulco, grupo político
dentro del PRI de donde salió el actual presidente y que protestó el retorno
del partido, un grupo que al parecer ya mostró parte de su influencia en la
exposición de información que sacó de la jugada a Josefina Vázquez Mota,
potencial candidata por el PAN y favorita en las encuestas que prefirió
declinar su participación en el proceso luego de la bomba mediática que se
liberó en su contra respecto al fuerte financiamiento gubernamental a su
Fundación, la oportunidad del PAN de dar la sorpresa se vio truncada, y el
cambio de jugada hacia el candidato "independiente" Alejandro
Encinas, también apoyado por el PRD pareciera volverse una realidad, una
pesadilla Gramsciana que pareciera convertirse en la punta de lanza para el
abordaje por parte de la "izquierda radical" respaldada por el PAN
más por ambición electoral que por verdadera vocación social, no olvidemos que
Encinas es una carta sorpresa por parte de Andrés López, ex jefe de Encinas,
quien cuenta con candidatos "satélites" en otros partidos y que aquí
pudiese grabar la partida a los ingenuos o desesperados PAN y PRD, es
imperativo arrebatar el Estado de México al corrupto PRI, pero esperemos que el
costo no sea la misma democracia y el cambio de manos a otro gobierno estatista
y populista.
El otro gran bastión del PRI es Coahuila, plaza hasta
hace poco junto a Veracruz, impenetrablemente PRIísta, Coahuila, junto al
Estado de México, Veracruz y Nuevo León sirvieron como base económica para
financiar el regreso del PRI a la presidencia, el endeudamiento, la corrupción
y la violencia sin freno se convirtieron en el sello particular de la
administración de los Moreira, familia con liderazgo estatal que pareciera
descender de las tradiciones de cacicazgo aún prevalecientes en algunas partes
del país, situación ciertamente preocupante ya que a pesar del lastimado estado
de la entidad, el cambio de poder, dentro de la misma familia Moreira ha
estancado cualquier investigación para determinar el alcance de los oscuros manejos
de los Moreira e imposibilitado deslindar responsabilidades.
No resulta sorpresa que el PRI Gobierno haya
aprovechado la coyuntura de la liberalización de precios de las gasolinas para
tomar una última gran tajada de la llamada "gallina de los huevos de
oro", ésta muy probablemente sea la última jugada del PRI para mantenerse
a flote y sobrevivir a lo que venga en el 2018, sí en 2000 la estrategia para
el PRI fue destruir la presidencia imperial que los mantuvo en el poder por 70
años, trasladando ese poder a los gobernadores, parece que para el 2018 también
detonará esos "puentes" con el fin de derrumbar toda estructura de
poder y dejar al país ante un vacío de poder y un desorden que pueda ser
abordado posteriormente en un contexto más favorable para ellos, es posible que
el PRI esté apostando nuevamente a hibernar otros 12 años, apostar a la mala
memoria del mexicano, a la falta de continuidad, a ser una oposición
destructiva y regresar más tarde para apoderarse de las ruinas.
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