Matt Pike, Pike Vs. The Automaton, 2022

Por lo general cuando pienso en Matt Pike, guitarrista de las legendarias bandas Sleep y High On Fire, me viene a la mente un poco Lemmy, el inolvidable líder de los Motorhead, y un poco Tom Warrior, líder de los brutales Celtic Frost. Cabe mencionar, que a lo largo de su carrera, Pike ha mantenido una línea musical que se debate entre los monolíticos riffs de Black Sabbath y los frenéticos ritmos de los Motorhead. Cansado de la inactividad de la pandemia, Pike decidió editar un disco “en solista” por decirlo de alguna manera, alejado de su habitual rutina con los High On Fire. El resultado ha tomado la forma de Pike Vs. The Automaton.

Abusive se encarga de abrir el disco con riffs que sin duda hacen eco directo en los Celtic Frost y sus bestiales ataques sonoros, las guitarras de Pike no pierden veneno en ningún momento y los ritmos se acercan de forma espectacular a los Black Sabbath. El tema es feroz, pero nada menos que esto se podría esperar de Pike, un hombre cuyo nombre es sinónimo de algunos de los más venenosos riffs del metal moderno y del llamado stoner rock. Podríamos acusar a Pike de no dar mucha variedad a sus composiciones, ¿Pero no fue esto lo que hizo tan populares a los Black Sabbath?

Para Throat Cobra, el tema abre con la batería de Jon Reid, y un ataque que nos pone directamente en territorio de Lemmy y sus Motorhead, metal duro con claras influencias de hardcore al estilo de los legendarios Discharge. Lo mejor del tema viene precisamente cuando Pike lanza un solo de guitarra capaz de perforarnos el cerebro. El bajo cortesía del reconocido productor Billy Anderson, también hace su rabiosa aparición. Anderson, un hombre que ha trabajado con Pike en los Sleep y que ha producido a los enormes Melvins y para los siempre interesantes Neurosis, es pieza clave en éste trio poderoso, que en momentos se ve aumentado por la esposa de Pike, Alyssa Maucere- Pike.

Para Trapped in a Midcave, Pike ya nos ha sumido en lo más nebuloso del Stoner Rock por el cual es reconocido, guitarras oscuras, monolíticas y con toques psicodélicos adornan el furioso tema impulsado por ritmos casi tribales, que en ocasiones nos podrían recordar cuando Lemmy cantaba con su primer banda reconocida, los tremendos Hawkwind. Un tema para flotar y alucinar por varios minutos. Epoxia es un tema corto e instrumental, que quizá podría recordarnos un poco por momentos a los Sleep, con su duro trabajo de bajo y batería, mientras que, para Land, Pike nos receta un tema acústico y cavernoso que de alguna manera busca dar variedad al disco, aunque corta un poco la intensidad conseguida hasta el momento.

El infierno completo se desata en la estruendosa Alien Slut Mum, una dura y abrasiva pieza del metal más salvaje que podamos imaginar, apenas partido en dos por una interesante sección cósmica de la guitarra de Pike y la batería de Reid, que transforman el tema en algo distinto, nos dan verdadera variedad y nos sorprenden por un instante. Apollyon es un tema destacable, ya que en éste Pike añade otra dimensión al sonido de su proyecto, brutal, más profundo y pesado, y menos abrasivo. Otro de los temas muy destacables del disco en el que Pike sin duda muestra de forma más amplia su capacidad compositiva. Pero Pike no abandona su naturaleza combativa por mucho tiempo, y regresa con Acid Test Zone en plan tormenta hardcore, un tema extraordinario y rabioso como pocos.

Hay un muy interesante intento de sonar épico por parte de Pike, un tema que seguramente a muchos les recordará a los Sleep más alucinantes. Un extraordinario festín de rabiosos riffs con que Pike nos va guiando através de Leaving The Wars of Woe. Esta es música realmente pesada y rabiosa, sin ninguna concesión, Pike suena furioso y liberado a la vez, Pike Vs. The Automaton es un disco que no decepciona y que cumple a la perfección con el gran legado musical de Pike, quienes lo hemos escuchado en sus andanzas con los Sleep y con los High On Fire, estamos satisfechos en su totalidad con tal brutal grabación, otra gran sorpresa de un año que pinta para ser realmente surrealista.