Buckcherry, Vol. 10, 2023

 

Los Nuevos "Veteranos" del Hard Rock

Por: Rock N Roll Animal

Disco número 10 en la carrera de esta banda de hard rock Californiana. Buckcherry llegaron más de una década tarde al mundo. Si su disco debut de 1999 hubiese sido publicado 10 años antes hubiera sido un fenómeno monumental (repleto de esos brutales riffs inspirados en AC/DC y Kiss y un Todd embriagado de la actitud de Bon Scott y Axl Rose). Parte del sonido que ha mantenido viva a la banda se reviva precisamente de esa época. Hay que reconocerles que han conseguido actualizar de forma exitosa el sonido del hard rock de hace casi 3 décadas. La banda tiene talento y sigue conjuntando poderoso riffs de guitarra y coros infecciosos de una forma que Axl Rose y Slash estarían orgullosos. No sería muy aventurado declarar que Buckcherry son la mejor y más constante apuesta del hard rock Californiano, o lo que queda de él. Josh Todd, el vocalista del grupo sigue siendo el único miembro que queda de la alineación original. Vol. 10 es una apuesta fuerte por el hard rock, de ese sucio y rabioso que promovían los Motley Crue y Guns N Roses en los 80s. Buckcherry es el justo heredero. This and That abre el disco con una cadencia que los Aerosmith o los Extreme seguramente envidarían. Hay guitarras pesadas, hay swing y hay mucha actitud Good Time avanza de forma lineal como tren a toda velocidad. La banda conoce a la perfección su oficio de materializar sólidos riffs de guitarra que le permitan a Todd explotar su actitud desafiante, ¿Sorprendería a alguien que en su disco debut participara el ex Sex Pistols Steve Jones? Keep On Fighting mete el acelerador a fondo, la sección rítmica de la banda es sólida como pocas y aunque aquí la melodía es un tanto más floja la furia que el grupo despliega lo compensa todo. Feels Like Love desentona un poco en el sentido que parece evocar el rock suave de bandas d ellos 80s como Foreigner. La banda regresa rápido al camino duro con One and Only que crea momentos de tensión bastante adecuados antes de tirarse por completo al precipicio. Los riffs de Lets Get Wild es material de leyenda, está claro que Buckcherry no es una banda perfecta o transgresora, el grupo no está descubriendo el “hilo negro”, pero ha hecho de su música algo muy peculiar, una burbuja en la que convive el pasado, el presente y el futuro de forma armoniosa, y salvaje. El cover del clásico de Bryan Adams Summer of 69 podría pensarse, está de más, pero la banda se aplica con verdadera devoción al tema y lejos de fallar, atinan de forma sobresaliente. Vol. 10 no suena a nostalgia, de alguna forma los Buckcherry se las ingenian para sonar contemporáneos y hacernos recordar que la actitud del hard rock más desafiante sigue viva. Bien podría ser éste, sin tantas pretensiones, uno de los mejores discos de hard rock del año, algo que ni Winger ni Extreme pudieron hacer.