Santa Baby y la Subversiva Santa Kardashian

La Navidad trae consigo esas viejas melodías que ya son parte de nuestros recuerdos de la temporada. Una de las más emblemáticas en épocas recientes es "All I Want for Christmas Is You", interpretada por la inigualable Mariah Carey. Esta canción, que resuena cada Navidad desde mediados de los años noventa, evoca recuerdos y emociones cada diciembre. Sin embargo, este año, una nueva melodía ha llegado para sacudir la tradición: "Santa Baby", interpretada por la influencer Kim Kardashian.

"Santa Baby" no es solo otra canción navideña; es un clásico atemporal de los años cincuenta, popularizado por la cantante Eartha Kitt. Aunque obviamente no crecí escuchando esta canción en un radio de transistores, la conozco porque hoy en día es posible encontrar versiones de esta en internet. No crecí escuchando a Kitt, pero sí la conocí durante mi infancia gracias a su papel como Catwoman en la serie de Batman producida en los años 60.

Kim Kardashian, conocida por sus excepcionales habilidades en el llamado "personal branding", su capacidad casi innata para captar la atención del público y romper internet con estridencia, se adentra audazmente en el mundo musical con su propia versión de este clásico. Su lanzamiento ha generado un revuelo considerable en redes sociales y más allá. Aunque no busca vender muchos discos ni disputar un lugar a Beyoncé en el medio tiempo del Super Bowl, Kardashian sabe perfectamente cómo mantenerse en la mente del público y acrecentar su marca personal como nadie.

El tema "Santa Baby" viene acompañado por un potente video dirigido por Nadia Lee Cohen. Esta obra visual sobresaliente combina estética y provocación. Cohen, cineasta, modelo y fotógrafa, es reconocida por su trabajo con marcas vanguardistas como Adidas y Balenciaga, así como por colaborar con artistas como Rihanna y A$AP Rocky. Su estilo distintivo brilla en este video, evocando la decadencia y nostalgia del viejo Hollywood, capturado en filmes clásicos como "Sunset Boulevard" y resonando con el arte visual contemporáneo en obras como "Mulholland Drive" de David Lynch.

Es imposible ver el video sin recordar las poderosas imágenes surrealistas y grotescas que caracterizan el trabajo de directores transgresores como David Lynch y Harmony Korine, cuyo provocador y polémico estilo parece haber sido adoptado exitosamente por Lee Cohen. El video exuda una atmósfera decadente, nostálgica y festiva, reminiscentes del espíritu de Federico Fellini. Kim aparece con una peluca rubia, gateando por el suelo de una casa en medio de un ambiente festivo decadente, rodeada de elementos inesperados: animales, peceras, futbolistas, imágenes religiosas, modelos, bodybuilders y más.

Cada escena de "Santa Baby" está impregnada de simbolismo y creatividad desmedida. La producción es un carnaval visual que invita a los espectadores a sumergirse en un mundo donde lo absurdo se encuentra con lo glamoroso. La influencia del cine clásico se siente en cada fotograma, recordándonos que el arte puede ser tanto un deleite visual como una experiencia emocional. Nadia Lee Cohen ha declarado que se inspira en la decadencia y nostalgia del viejo Hollywood. Esta visión artística se traduce en un video que no solo acompaña a la canción, sino que la eleva a nuevas alturas. Aunque algunos puedan cuestionar las habilidades vocales de Kim Kardashian, lo cierto es que su talento para el marketing sigue siendo indiscutible. En un mundo donde las redes sociales dictan tendencias, Kardashian ha sabido aprovechar su plataforma para hacer ruido. Su habilidad para generar conversación es innegable; cada publicación suya tiene el potencial de volverse viral.

Al final del video, una sorpresa añade un toque humorístico y subversivo que evoca elementos poderosos de la cultura pop: Macaulay Culkin, conocido por su papel en "Mi Pobre Angelito", vestido como Santa Claus. Su aparición es un guiño nostálgico que conecta generaciones y recuerda momentos entrañables de nuestra infancia. Este detalle refuerza la idea de que la música navideña no solo se trata de melodías; también evoca recuerdos compartidos. "Santa Baby" no se convertirá en un clásico atemporal como "All I Want for Christmas Is You", pero su impacto visual y cultural es innegable. Seguramente no cantaremos "Santa Baby" en años venideros, pero el video permanecerá grabado en nuestra memoria por mucho tiempo.