Mr. Olympia 2025: ¿Quién Tomará el Trono de CBUM en Classic Physique?

Año tras año, la categoría de Classic Physique gana fuerza y magnetismo en el universo del bodybuilding. Desde su creación en 2016, surgió como respuesta a la brutalidad del Open Bodybuilding, apostando por físicos más equilibrados y armónicos, herederos directos de la estética dorada de íconos como Arnold Schwarzenegger y Frank Zane: hombros anchos, cintura estrecha y un porte casi escultórico. Danny Hester inauguró el trono, y tras él llegaron figuras que marcaron época, como Breon Ansley —dos veces campeón del Mr. Olympia Classic Physique— y, sobre todo, el mítico Chris Bumstead, mejor conocido como CBUM, quien dominó seis veces el Olympia antes de colgar el cinturón en 2024.

En Classic Physique no basta con músculo: importa la proporción entre hombros y cintura, la armonía por encima del exceso y un posado que evoque el arte clásico más que la pura demostración de fuerza. Tras el retiro triunfal de CBUM, el vacío se hizo sentir de inmediato, y varios atletas comenzaron la cacería para ocupar ese espacio casi mítico. Entre ellos, destaca la apuesta más seria: el alemán Mike Sommerfeld, quien el año pasado acarició la cima tras quedar en segundo lugar, solo detrás de Bumstead. Su reciente triunfo en el Arnold Classic no hizo más que consolidarlo como favorito, aunque la contienda de este año promete ser una de las más intensas y reñidas de la historia reciente.

El Olympia de 2025 no será solo una competición: será una pugna por definir el futuro mismo de la categoría. Tras Sommerfeld, tres nombres resuenan con fuerza: Terrence Ruffin, heredero natural de la estética de Frank Zane y viejo rival de CBUM, que regresa con hambre de gloria; Ramon Rocha Queiroz, una auténtica superestrella que ya ha rozado el título y cuenta con una legión de seguidores; y Urs Kalecinski, la sensación europea que avanza cada año con paso firme, y que con un poco más de densidad podría dar el gran golpe. La incógnita más emocionante será, sin duda, la reaparición de Breon Ansley, quien busca revivir su reinado. Y en la sombra, dos jóvenes promesas cargadas de ambición: el español Jose Maria Muñoz, conocido como Josema Beast, y Logan Franklin, ambos decididos a romper el orden establecido.

Pero más allá del músculo y las poses, este Olympia se juega algo mayor: la esencia misma de Classic Physique. Con el retiro de CBUM, la categoría enfrenta críticas sobre si está perdiendo su identidad: algunos señalan que Sommerfeld empieza a rozar el volumen propio de la Open, un debate que ya envolvió a Bumstead el año pasado, cuando se atrevió a probar suerte en esa categoría tras su última victoria. En el fondo, la pregunta es brutalmente simple: ¿puede el próximo campeón llenar el hueco que dejó CBUM, mantener el equilibrio entre estética y masa, y seguir haciendo vibrar al público? Octubre marcará la respuesta. Y allí, en ese escenario iluminado, descubriremos si Classic Physique reafirma su espíritu o queda atrapada entre la nostalgia dorada y la tentación del exceso.