Lightning Bolt-Fantasy Empire (2015)
Lightning
Bolt-Fantasy Empire (2015)
“Nuestras virtudes y nuestros fracaso son inseparables, como la materia
y la energía, cuando estas se separan, el hombre ya no existe.”
Nikola Tesla
Por: Ghost Writer
Los Lightning Bolt son una verdadera anomalía en el mundo de
la música extrema, increíblemente contagiosos y con estupendos oídos, a pesar
de los decibeles, para introducir melodías en medio del caos sonoro, que les
distinguen notablemente de la mayor parte de actos extremos en el mundo de la
brutalidad musical.
Junto con los Fantomas, los Lightning Bolt son la única banda de los EUA que considero capaces de ponerse al tú por tú con bandas de extremo Japanoise y salir bien librados, ni solo en cuanto a volúmenes de refiere, sino también en cuanto a habilidades musicales y resistencia.
The Metal East es el primer tema provocador de su nuevo disco Fantasy Empire que bien pudiera ser una alusión directa a muchas de las ambiciosas y podridas naciones de nuestro planeta, aun y que lo de los LB no sea la política mundial.
Hay que reconocer el esfuerzo monumental de esta banda por no repetirse, esto a pesar de sus limitados recursos, un bajo y una batería, y aunque Fantasy Empire no es un Wonderful Rainbow o un Hypermagic Mountain, los elementos para un buen disco de los LB están ahí, el bajo imposible de Brian Gibson, manteniendo no solo el paso y el fondo rocoso del sonido, también saliendo a la superficie disfrazándose de filosa guitarra para marcas diminutos toques de melodía punzo cortante, esto al tiempo que el genial Brian Chippendale, uno de los mejores y más impresionantes bateristas de nuestros tiempos nos vuelve a dar una lección de creatividad y atletismo detrás de su instrumento, sin caer en lo excesos de lo progresivo, pero demostrando al igual que el gran Dave Lombardo un fino oído para los espacios y para los súbitos cambios de ritmo.
Over the River and through the Woods es un potente tema con reminiscencias al hardcore punk, mostrando un desenfreno de principio a fin, con un trabajo perfectamente bien acoplado por parte de los dos músicos, destacando también el trabajo de Chippendale en el manejo de las alucinantes voces y samples.
Horsepower, gracias al trabajo de Gibson en las cuerdas, adquiere características ásperas y toxicas en realidad, siendo empujadas, al precipicio gracias a los ritmos insistentes de Chippendale, esto mejor ejemplificado por King of my World, con un soberbio trabajo rítmico a cargo de Chippendale quien nos demuestra aquí que los LB no son sólo demonios de la velocidad, sino estupendos prestidigitadores de ritmos y sonidos, con un Chippendale galopante y un Gibson prodigioso en las cuerdas, o que decir del rock troglodita de Mythmaster con sus torbellinos ascendentes y descendentes de ruido puro.
Leave the Lantern Lit es un ejemplo notable de la banda buscando nuevas texturas y explotando nuevos territorios, para después regresar a la contundencia de Dream Genie, para volver otra vez a los experimentos osados de Snow White, que me resulta una especie de brutal experimento con sonido a unos Iron Maiden con una sobredosis letal de esteroides anabólicos.
Fantasy Empire no abrirá nuevas puertas para los LB, y posiblemente tampoco traerá nuevos seguidores del grupo y aunque carece de la solidez de discos clásicos de la banda, demuestra que el concepto de la banda está lejos de agotarse y que ya se empiezan a gestar nuevas e interesantes ideas en el seno de la banda.
Junto con los Fantomas, los Lightning Bolt son la única banda de los EUA que considero capaces de ponerse al tú por tú con bandas de extremo Japanoise y salir bien librados, ni solo en cuanto a volúmenes de refiere, sino también en cuanto a habilidades musicales y resistencia.
The Metal East es el primer tema provocador de su nuevo disco Fantasy Empire que bien pudiera ser una alusión directa a muchas de las ambiciosas y podridas naciones de nuestro planeta, aun y que lo de los LB no sea la política mundial.
Hay que reconocer el esfuerzo monumental de esta banda por no repetirse, esto a pesar de sus limitados recursos, un bajo y una batería, y aunque Fantasy Empire no es un Wonderful Rainbow o un Hypermagic Mountain, los elementos para un buen disco de los LB están ahí, el bajo imposible de Brian Gibson, manteniendo no solo el paso y el fondo rocoso del sonido, también saliendo a la superficie disfrazándose de filosa guitarra para marcas diminutos toques de melodía punzo cortante, esto al tiempo que el genial Brian Chippendale, uno de los mejores y más impresionantes bateristas de nuestros tiempos nos vuelve a dar una lección de creatividad y atletismo detrás de su instrumento, sin caer en lo excesos de lo progresivo, pero demostrando al igual que el gran Dave Lombardo un fino oído para los espacios y para los súbitos cambios de ritmo.
Over the River and through the Woods es un potente tema con reminiscencias al hardcore punk, mostrando un desenfreno de principio a fin, con un trabajo perfectamente bien acoplado por parte de los dos músicos, destacando también el trabajo de Chippendale en el manejo de las alucinantes voces y samples.
Horsepower, gracias al trabajo de Gibson en las cuerdas, adquiere características ásperas y toxicas en realidad, siendo empujadas, al precipicio gracias a los ritmos insistentes de Chippendale, esto mejor ejemplificado por King of my World, con un soberbio trabajo rítmico a cargo de Chippendale quien nos demuestra aquí que los LB no son sólo demonios de la velocidad, sino estupendos prestidigitadores de ritmos y sonidos, con un Chippendale galopante y un Gibson prodigioso en las cuerdas, o que decir del rock troglodita de Mythmaster con sus torbellinos ascendentes y descendentes de ruido puro.
Leave the Lantern Lit es un ejemplo notable de la banda buscando nuevas texturas y explotando nuevos territorios, para después regresar a la contundencia de Dream Genie, para volver otra vez a los experimentos osados de Snow White, que me resulta una especie de brutal experimento con sonido a unos Iron Maiden con una sobredosis letal de esteroides anabólicos.
Fantasy Empire no abrirá nuevas puertas para los LB, y posiblemente tampoco traerá nuevos seguidores del grupo y aunque carece de la solidez de discos clásicos de la banda, demuestra que el concepto de la banda está lejos de agotarse y que ya se empiezan a gestar nuevas e interesantes ideas en el seno de la banda.
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