Bob Dylan-Shadows In The Night (2015)
Bob Dylan-Shadows
In The Night (2015)
“La inspiración es difícil de conseguir, tienes que tomarla dónde la
encuentras.”
Bob Dylan
Una noticia inesperada, aunque bien recibida, claro, luego
del sobresaliente Tempest del 2012, año que hoy en día me parece bastante
lejano, Bob Dylan regresa en plena forma con un disco nuevo que se aparta un
poco de la línea a la que Bob nos suele tener acostumbrados, aunque muchos no
querríamos que Dylan terminara repitiéndose infinitamente, y de sobra sabemos
que Dylan no opera de esta manera, Shadows In The Night es un extraño disco de
ruptura proveniente de alguien que no debiera resultarnos extraño se atreva a
cosas a las que muchos artistas simplemente no se atreverían, curiosamente
Shadows In The Night funciona como una extraña desviación musical en la carrera
de Dylan, aunque hay que reconocerla que no es una desviación del todo exitosa,
a pesar de que con puro talento Dylan consigue hacer del disco algo disfrutable
si bien poco trascendente.
Shadows In The Night es un disco de versiones de viejos
temas de la época de Frank Sinatra, alguien que pareciera más la antítesis de
Dylan, que uno de sus posibles precursores, por un lado, Sinatra, el monumento
a los vocalistas impecablemente vestidos, impecablemente peinados y de
impecable voz, por otro Dylan, despeinado, desaseado, de aguardentosa voz y
posiblemente drogado, aunque eso sí, con una capacidad de trascender a través
de la creación de sus temas, más allá de la capacidad de trascender de Sinatra
vía sus interpretaciones, en un mundo ideal, posiblemente este disco debió ser
de un Dylan haciendo versiones de un Jacques Brel, pero creo que el mismo Dylan
pretendió sacudirnos con esta curiosa desviación, que empata un poco con el
disco de arreglos orquestales que Neil Young, posible alumno de Dylan, editó
hace unos meses.
Si bien en el pasado Dylan no impactó por sus letras densas
y poco cotidianas, para luego sacudirnos una vez más con sus composiciones
acompañadas de guitarras eléctricas, aquí la sacudida es un tanto bizarra ya
que Dylan hace a un lado su vena de compositor por la del Dylan cantante, y hay
que reconocerlo, que a diferencia del mal estado de su voz o su descuido para
proyectarla, en discos anteriores, aquí Dylan e enfoca y consigue una
entrañable interpretación de cada uno de estos temas, algunos de ellos parte
del llamado “cancionero tradicional estadounidense”, en un experimento que
aunque dudo algún día escuchar, hubiese funcionado más acorde para alguien como
Leonard Cohen, aunque afrontémoslo, ¿Podríamos imaginarnos a Cohen cantando
temas que alguna vez interpretó Sinatra? Así de extraño resulta Shadows In The
Night.
Shadows In The Night funciona a su manera como un disco para
disfrutar de la mundana interpretación de Dylan, quien aquí exhibe su
imperfecta, pero peculiar voz en estupenda forma, dándose definitivamente un
lujo de bajarse de su monumental pedestal y ser simplemente uno más de esos
artistas que se dejan llevar por las “modas”, ya que como ha sucedido con los
“Unplugged”, el disco de covers de temas tradicionales del vecino país del
norte es una ruta que ya han transitado otros, hasta un Robbie Williams.
Dylan consigue lo que pocos, al hacer suyos los temas e
imprimir su particular huella, haciéndonos pensar en todo momento en Dylan y
nunca en los temas, que posiblemente para muchos no nos harán gran sentido, y
es que este es casi un Dylan desechable, uno que no busca para nada la
trascendencia y que por este único momento, esperemos, se conforma con la
comodidad del momento, con lo inmediato, con lo temporal.
Muchos estarán desesperados por el próximo experimento, por
la próxima reafirmación de Dylan como un monstruo imparable de la música, pero
aquí, Dylan sólo se limita a calentar un poco su voz, a brindarnos un buen
momento, y posiblemente a mantenerse en forma y tomar vuelo para lo que pudiese
ser un interesante trabajo futuro.
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