Los Llamarada-Gone Gone Cold
El escalofriante adiós (aparentemente definitivo) de una de las bandas más significativas de Monterrey de los últimos años, si bien Los Llamarada, para el común de la gente de la ciudad no existen o son completamente desconocidos, Los Llamarada serán recordados por haber hecho las cosas a su manera y obtener una repercusión significativa fuera del país, no siempre se podrá ser profeta en tierra propia, y los que lo son a veces es porque vendieron su alma, este no es el caso aquí, si bien, para reseñar el Biophilia de Bjork, de una manera exitosa se requería de un manual y los apps del ipad, y para reseñar el Exquisite Corpse de Mattin se requería de antemano que nos explicaran en que consistía el concepto de la grabación, para poder entender el Gone Gone Cold de Los Llamarada se requeriría pasar unas semanas en Monterrey, y vivir el miedo que se ha sufrido y la decepción tan grande que se ha sufrido al ver una “próspera” ciudad convertirse en un campo de batalla, la paranoia al ver unidades “patrullando” las zonas, cuerpos colgados de puentes peatonales conocer el terrorismo y constantes noticias sobre cuerpos disueltos en acido, Gone Gone Cold es un disco de oscuro, sucio, molesto y brutal, desde la fúnebre portada, el título, el sonido y demás, coherencia de principio a fin para transmitir un mensaje final, un amargo adios.
Inmersos en su característica y poderosa nube densa de feedback y ruido, Los Llamaradas artesanos geniales del lo-fi arrancan con la insistente Bury The Light, acaso una manifestación inconsciente del deseo de cerrar los ojos y dejar de ver tantas cosas malas que han sucedido en la ciudad? Una pieza de garage puro, cacofonía sin concesiones como si Glenn Branca aquel celebre compositor, pieza clave para el surgimiento de la no wave (y podríamos decir padre de los Sonic Youth) se decidiera a hacer una versión libre y propia del Louie Louie de los legendarios Kingsmen.
Hace algunos años (muchos por ciertos) unos amigos solían tener una banda de metal extremo llamada Inmortal (sic) Death, nombre que debo admitir, en su momento me causo mucha risa, ya que el nombre llevaba implícito algo de incongruencia desconocimiento e ignorancia, pero vuelvo a topar con un juego de palabras similar, esto casi dos décadas después, esta vez bajo otro contexto y como nombre de una canción, Death Will Die, y tristemente las cosas hacen sentido, en una ciudad como esta hasta la muerte estaría atemorizada con tanta brutalidad y desprecio por la vida. folk cósmico? folk funebre?, creo que ni los mismos Llamaradas tendrían la respuesta aquí, una pieza fúnebre, un dirge in the dark, de esos que acusaban a los Velvets de tocar hace casi 4 décadas, y después una feroz un ataque de ruido a los sentidos, una feroz conclusión al puro estilo Llamarada con teclados para anunciar el fin del mundo (por lo menos del que conocemos), en verdad estos chicos saben más de lo que aparentan? En realidad están convencidos de una fatalidad que está por llegar?
The Sudden Flesh es puro garage, un sonido característico en la banda, su sonido, informado por un ritmo cercano a esas adaptaciones del krautrock que hacían The Fall o Wire en pleno auge del post punk, y por momento, esas vocales que me recuerdan a la genial Phew con los Aunt Sally o que tal Heaven of Glass, de la cual pudiera decirse que es la pieza principal del disco, una versión fantasmal del blues tocado en alambre de púas que el tejano Jandek suele hacer, esas líneas de guitarra que lastiman, que te hacen pensar en dedos ensangrentados y una armónica espectral que pareciera dar un toque funesto aún mayor a esta marcha oscura.
Gone Gone Cold sobresale por su manufactura totalmente sumergida en el lo-fi, una grabación tan casera, tan gloriosamente hecha en casa, que me pone la piel de gallina pensar lo atemorizados que debieron estar los vecinos de estos chicos durante las grabaciones, el post punk descarado de Tu Diversión (extrañamente la única con titulo en español) con una guitarra poseída y sumamente expresiva, y esas vocales de victima de secuestro atada en la cajuela del auto, que sólo le dan un contexto más fúnebre, o ese sonido tan distorsionado que se precipita y funde las bocinas de Switch Static que nos trae a Los Llamaradas más bestiales, en total punk mode, como pocas veces les habíamos escuchado invocando la furia de una ciudad que busca una salida, la búsqueda de la máxima aceleración para lograr la transformación en pura energía.
El disco termina en dos partes, con la majestuosa All Gods Collapse, una marcha poderosa, que puesta en movimiento pareciera ir convirtiéndose en una bola de nieve, su insistente sonido magnificándose, sus poderosas guitarras rabiosas y finalmente Inside The Fire (en verdad el adiós definitivo?) un blues poderoso hecho con mano firme, la banda que hizo del caos un estilo propio, finalmente se alza con la victoria en pleno dominio de su sonido, vaya manera de terminar una carrera, el mejor disco de la banda, y la última oportunidad para apreciar una propuesta que no debimos perdernos desde la primera vez que surgió.
Una lástima leer que Los Llamarada se van... gracias a internet hace un par de años dí con The Exploding Now, Take The Sky y el mini The Very Next Moment, una onda cercana a The Hospitals pero con un sabor latinoamericano escondido debajo de ese excelente ruido. Ahora sólo queda esperar por proyectos futuros que seguro vendrán en algún momento. Por cierto, entiendo el horror del que hablas en Monterrey porque soy de Venezuela, un país donde las atrocidades han estado a la orden del día, sobre todo desde hace una década para acá.
ReplyDeleteSaludos.
Si yo pensé lo mismo, localmente son mis favoritos, es bueno saber que son apreciados allá con los hermanos de Venezuela, de hecho creo son más apreciados een cualquier otro lado más que aqui, gracias por el comentario y no hay de otra, seguir buscándo cambiar este mundo, segundo a segundo, minuto a minuto, paso a paso, saludos!
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