Monolake-Ghosts

Me gustan esos ritmos potentes con que abre Ghosts, la pieza inicial y que da nombre al disco más reciente de Monolake aka Robert Henke, Henke o Monolake como quieran llamarle es de esos genios que han llevado a la electrónica a lugares insospechados, la ha hecho amigable y como un virus la ha esparcido por el mundo, Henke esta a cargo de varios desarrollos de software para creación música, entre ellos el afamado Ableton.

Ghosts seguramente mantendrá los pies inquietos de más de un escucha, con sus ritmos techno y sonidos cuasi industriales materializándose de forma sorpresiva, entre voces que susurran palabras incomprensibles, si, precisamente, como fantasmas, pero Monolake no busca ponerte a bailar precisamente, ni sacudirte con un techno duro, por el contrario su música vibra, se vuelve alucinante y es creadora de espacios bastante oscuros e interesantes, por otro lado Toku se acerca un poco a las excursiones de música concreta hechas por el producto inglés Burial, tomando sonidos comunes, y cotidianos y analizándonos con lujo de detalle, mientras un halo espectral los va cubriendo, Toku es enigmática y minima si quieren, pero pareciera un pequeño juego de destreza que resulta difícil de resolver, pero que lo va envolviendo a uno.

Afterglow hace uso de ritmos quebrados y resonancias cuasi metálicas, pero no concreta mucho, pareciera más un interludio y después nos llega el sonido de Hitting The Surface, poseedora de una rítmica impecable, abre con sonidos sintetizados de origen amenazador y después nos impacta con sus ritmos contagiosos, la cinética de Monolake en todo su esplendor cual máquina bien aceitada, dinámica que se repite en Discontinuity, con sus espirales diseñadas para poner a girar el cerebro, Existence Of Time y su feroz rugido anuncia una nueva bomba sónica arrojada por Henke, una de las piezas principales del disco, con sus impactos poderosos de sonido y bajos destructores, capaces de poner a temblar la misma tierra.

Definitivamente Henke trata de proporcionar un equilibrio entre sus piezas más contundentemente dinámicas y otras más atmosféricas, que se acercan peligrosamente al más puro ambient, pero piezas como Phenomenon tienden a romper un tanto con la poderosa inercia lograda de inicio, disculparan la comparación, o el uso bizarro de ejemplos, pero no se si recordaran aquellos primeros discos clásicos de Pantera, en que en las primeras 4 o 5 canciones te subyugaban de manera brutal y la inercia de esa intensidad te acompañaba durante todo el disco, eso es algo que siempre he admirado en el orden en que algunos músicos acomodan sus canciones y consiguen poderosos impactos, caso inverso, siento que Ghosts trata de ser diversos, de mostrar diferentes caras de Monolake, pero esto le resta un poco de intensidad y de continuidad al impacto que se pudiera lograr, Unstable Matter es rica en percusiones y sonidos causales bien tratados, mutados y transformados para lograr interesantes efectos, además de su casi cinemático manejo de la tensión, cosa que se agradece y mucho, pero es hasta Lilith que Henke recupera el aliento y nos sacude con la siguiente marea sónica a más de 140 bpm (o ritmos por minuto, como le quieran llamar).

Me quedo con Foreign Object, que pareciera resumir los momentos más intensos del disco al lado de sus momentos más atmosféricos, brindándonos una poderosa suma de todas las partes que no sólo nos deja claro la genialidad de Henke y el gran nivel de Monolake, Ghosts es un agradecido regreso en forma y un muy disfrutable disco, con ritmos cerebrales que ponen a la mente a bailar, a la vez que mantiene los sentidos alertas en espera de cada uno de los inquietantes ritmos, olvidémonos un poco de que tan grande o poderosa pueda ser la aportación científica de Henke a la música electrónica y concentrémonos en la poderosa aportación musical directa que nos hace con este disfrutable Ghosts