Exodus, Bonded by Blood

Exodus, Bonded by Blood 

Por : Erreh Svaia 

Rock N Roll Animal 

El esfuerzo aplicado a lo largo de la carrera siempre será importante (Ahí está el ejemplo del libro sobre correr escrito por el genial literato Haruki Murakami), si se aplica de acuerdo a una metodología adecuada puede casi asegurar un resultado positivo, pero sin el resultado, difícilmente pudiéramos hablar de logros basados sólo en el puro esfuerzo, Ronaldo pudo haber dado el juego de su vida contra España hace unos días, pero el empate se encargará de borrar su hazaña, en el caso de la selección mexicana y su triunfo ante Alemania, de no haberse sostenido el gol de la ventaja, con un empate, perdería su carácter histórico, huneramos terminado en el "jugaron como nunca y perdieron como siempre" un mero gol, no los tres de Ronaldo, hicieron un resultado histórico.

Podemos recordar grandes batallas, como la que libraron los Beatles y los Beach Boys en los 60s en busca de la supremacía de la música pop moderna, el proceso dejó debilitado mental y emocionalmente a Brian Wilson, al tiempo que los Beatles de alzaban con la corona del pop y editaban el Sgt Peppers que de convertiría en uno de los iconos mayores de la era del flower power, Wilson, derrotado, sufriría un quebranto emocional de tal magnitud que jamás volvería a ser el mismo, su legendaria carrera se vendría abajo sin remedio.

A principios de los 80s se dio otra encarnizada batalla de poder musical, Exodus y Metallica, dos bandas de la Bay Area en California, chocaban de frente por el cetro del naciente Thrash Metal, los Exodus, más experimentados, parecían destinados a convertirse en los reyes del género, su demo con varios temas comenzaba a circular y a ganarles adeptos, mientras que los jóvenes de Metallica perdian a uno de sus miembros claves, el conflictivo (pero gran músico, a niveles de un Varg Vikernes, Kanye West, o Luisito Rey) guitarrista y vocalista Dave Mustaine, era cuestión de tiempo que uno de los dos grupos debutará con sus disco y gozará de una buena distribución por parte de la disquera para coronarse monarcas del género.

Cambios en su alineación, perdieron un miembro clave que se fue a Metallica (Kirk Hanmett), y problemas internos de su disquera retrasaron la salida del disco de Exodus, que llevaría por nombre Bonded By Blood (Ese de la legendaria portada con los dos siameses, uno bueno y uno malo), de la mano de su líder Paul Baloff, y del guitarrista compositor Gary Holt, Bonded By Blood se convertiría en un hito dentro de la música Thrash Metal, el disco que debió coronar a Exodus como pioneros y campeones del género, de no ser por Metallica que consiguió a base de mejor disciplina y organización, editar primero el legendario Kill Em All, Metallica pasaría a la historia, los Exodus serían injustamente casi borrados del mapa, nadie recuerda al que llegó en segundo lugar, para cuando Exodus pudo tener a la venta el Bonded By Blood, Metallica ya estaba en promoción del Ride The Lightning, cambiando el mundo del Thrash Metal para siempre.

Desde las rabiosas guitarras de Holt y Hunolt, el llamado "equipo H", la potente batería de Tom Hunting y la eléctrica ejecución vocal de Baloff (heredero definitivo de una voz y una actitud muy a la Bon Scott de los AC/DC) en el tema que da nombre al disco, una poderosa descarga de adrenalina con estupendos solos de guitarra por parte de Hunolt, pero el ataque no termina ahí, Exodus, la canción, también lleva abrasivas guitarras y la demoledora batería de Hunting, pero es probablemente en temas como And Then There Were None, que la banda brilla en realidad con sus infecciosos ritmos, el carisma absoluto de Baloff y una suerte de coros pandilleriles que recuerdan bastante la vibra del Damaged de los Black Flag, o el torbellino musical de A Lesson in Violence, posiblemente la canción más emblemática de la banda y de Baloff.

Temas como Metal Command revelan, al igual que en el caso de Metallica, la profunda influencia de la New Wave of British Heavy Metal con sus bandas como Iron Maiden, Samson, Venom y Saxon, entre otras), mientras otras como Piranha, con su rabiosa influencia punk parecería crear una encantadora cruza entre los Black Flag y Iron Maiden, para cerrar más tarde con dos piezas exquisitas, Deliver Us to Evil, que pudo pulverizar a los Metallica del Kill Em All si la suerte hubiese ayudado, o la fabulosa Strike of the Best, en la cual pareciera que el mundo entero se precipitase a su fin de manera inevitable, como pocos, los Exodus consiguieron captar el momento cúspide de la era dorada del Thrash Metal, el esfuerzo fue enorme, pero el resultado para su mala suerte no se dio en el momento adecuado, la historia pudo ser otra, pero la oportunidad de escuchar ese momento y revivirlo, y tener la sensación de ser afortunados por poder escuchar lo que muchos se perdieron, vale oro.

Comments

Popular Posts