Vacaciones Permanentes
Vacaciones
Permanentes
“Odio la política, no me gusta ningún partido, uno no debería ser parte
de ellos, uno debe permanecer como individuo, permaneciendo en el centro,
cualquiera que se una aun partido deja
de pensar.”
Ray Bradbury
Por: Erreh Svaia
Tres partidos están cercanos a perder su registro este 7 de
Junio: El Partido Humanista (PH), el Partido Encuentro Social (PES) y el
Partido del Trabajo, si el PT está muy cercano a desaparecer luego de alguna
vez ser la cuarta fuerza política del país, el PT ha sido desplazado por otros
participantes como el Partido Verde y Nueva Alianza, que no pasan de ser
partidos satélites (¿Cómo alguna vez lo fue el PT, o lo seguirá siendo?).
Los orígenes del PT siempre fueron unos muy dudosos, creado en la época salinista por Alberto Anaya, mucho se dijo de la amistad de este, durante su juventud con los hermanos Salinas y del uso de este partido satélite, aparentemente de izquierda, del cual se decía había sido creado para restar fuerza al PRD que empezaba a perfilarse como un fuerte contendiente en los procesos electorales y un posible dolor de cabeza futuro para el sistema.
El PT viviría sus mejores épocas con una Cecilia Soto como candidata a la presidencia, una mujer brillante, clara y lucida, de fuertes raíces en la izquierda nacional y de un gran arrastre popular que conseguiría hacer de este partido una fuerza importante en el ambiente político, y a la vez haciendo millonario a su líder, Anaya, quien se habría de perpetuar como diputado-senador plurinominal, enriqueciéndose de la noche a la mañana, nada que ver con sus orígenes como modesto líder social del movimiento Tierra y Libertad.
Se perdería el rumbo del partido en años posteriores convirtiéndose en un mero comparsa de otros partidos de izquierda, perdiendo su fuerza ideológica y únicamente concentrándose de una manera poco creativa en conservar su registro, usando personajes populares (y nefastos) de la televisión como candidatos, propiciando que se les llame el Partido de la Televisión, es este PT decadente y mediocre al que debemos decirle adiós, ese cuyo líder Alberto Anaya muestra su admiración por las "proezas" del regimen nefasto de Norcorea, o ese que alaba los avances del regimen Castrista en Cuba, mostrando su falta de conexión con la realidad.
Desparecerán 2 de los 3 partidos nacidos en esta elección (el PH, el PES y Morena) siendo Morena el único que probablemente permanecerá, y no por su ideología o propuestas, sino por el arrastre popular de Andrés Manuel López, único activo conocido del partido, que parece más un culto a su personalidad que una asociación política.
Lo que menos necesita México son más partidos, dejemos que éstos se vayan para siempre, nos cuestan mucho ya, lo que necesitamos es exigir una mejor representación y más transparencia en los partidos existentes y que trabajen en impulsar candidatos honestos, preparados e Inteligentes que trabajen para el bien de la sociedad.
Los orígenes del PT siempre fueron unos muy dudosos, creado en la época salinista por Alberto Anaya, mucho se dijo de la amistad de este, durante su juventud con los hermanos Salinas y del uso de este partido satélite, aparentemente de izquierda, del cual se decía había sido creado para restar fuerza al PRD que empezaba a perfilarse como un fuerte contendiente en los procesos electorales y un posible dolor de cabeza futuro para el sistema.
El PT viviría sus mejores épocas con una Cecilia Soto como candidata a la presidencia, una mujer brillante, clara y lucida, de fuertes raíces en la izquierda nacional y de un gran arrastre popular que conseguiría hacer de este partido una fuerza importante en el ambiente político, y a la vez haciendo millonario a su líder, Anaya, quien se habría de perpetuar como diputado-senador plurinominal, enriqueciéndose de la noche a la mañana, nada que ver con sus orígenes como modesto líder social del movimiento Tierra y Libertad.
Se perdería el rumbo del partido en años posteriores convirtiéndose en un mero comparsa de otros partidos de izquierda, perdiendo su fuerza ideológica y únicamente concentrándose de una manera poco creativa en conservar su registro, usando personajes populares (y nefastos) de la televisión como candidatos, propiciando que se les llame el Partido de la Televisión, es este PT decadente y mediocre al que debemos decirle adiós, ese cuyo líder Alberto Anaya muestra su admiración por las "proezas" del regimen nefasto de Norcorea, o ese que alaba los avances del regimen Castrista en Cuba, mostrando su falta de conexión con la realidad.
Desparecerán 2 de los 3 partidos nacidos en esta elección (el PH, el PES y Morena) siendo Morena el único que probablemente permanecerá, y no por su ideología o propuestas, sino por el arrastre popular de Andrés Manuel López, único activo conocido del partido, que parece más un culto a su personalidad que una asociación política.
Lo que menos necesita México son más partidos, dejemos que éstos se vayan para siempre, nos cuestan mucho ya, lo que necesitamos es exigir una mejor representación y más transparencia en los partidos existentes y que trabajen en impulsar candidatos honestos, preparados e Inteligentes que trabajen para el bien de la sociedad.
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