Cypress Hill, Elephants On Acid, 2018
Cypress Hill, Elephants On Acid, 2018
Por: Erreh Svaia
Rock N Roll Animal
La época de oro de los latinos, como una moda en los EEUU
parece haber menguado ya bastante la última década, aún queda el recuerdo de
Jennifer López, Antonio Banderas y Sofia Vergara en pantallas grandes y chicas
a lo largo del país, tras las cámaras, el éxito artístico y comercial de
cineastas como Pedro Almodóvar, Alejandro González Iñarritu, Alfonso Cuarón y
Guillermo del Toro, en el ambiente musical verdaderamente interesante puedo
pensar solamente en los Cypress Hill proveniente del crisol cultural conocido
como California, específicamente South Gate, el trio de hip hop se volvería
bastante famoso principalmente por un par de premisas, su afición por la
mariguana, sus raíces latinas (algunas letras y “slang” en español), sus ritmos
lentos y aturdidos y una colección de “simples” poco ortodoxos.
Su disco debut de 1991 con el sencillo How I Could Just Kill
a Man”, o el Black Sunday dos años más tarde con clásicos como Insane in the
Brain, o When the Shit Goes Down, los hicieron inmensamente famosos para toda
una generación aún embriagada de los tiempos del Lolapalooza original, el éxito
embriagador y la caída de la moda latina puso fuera de combate al trio de
manera momentánea, su pertenencia a un contexto temporal parece haberlos dejado
tan fuera de base como le sucedió al grunge o al mal llamado “rock
alternativo”, su música, a pesar de poseer suficiente trascendencia salió del
radar de las juventudes y a pesar de esfuerzos admirables por parte del grupo
de regresar a su años de gloria, pareciera ser que los astros difícilmente se
volverán a alinear a su favor.
Elephants On Acid es la más reciente grabación de los
Cypress Hill, y aunque no parece significar la siguiente revolución sonora para
el mundo del hip hop, si consigue de alguna manera recrear momentos
interesantes musicalmente hablando, con varias propuestas llamativas por las
que vale la pena mencionar el disco, Band of Gypsies invoca de igual forma a la
legendaria banda del “gitano eléctrico” Jimi Hendrix, un alto grado de
psicodelia y coqueteos con imágenes y sonidos orientales, los ritmos tan lentos
como de costumbre y las rimas tan alucinante como era de esperarse, a pesar de
los elementos esperados permaneciendo en su sitio, sería difícil que los CH nos
pudieran sorprender una vez más, con más de lo mismo (y cuando trataron de
adentrarse en el mundo del dubstep, el resultado fue catastrófico).
Es notoria la ausencia de ese elemento hasta cierto punto
trasgresor y corrosivo de aquellos primeros años, a pesar de que la nublazón
tóxica de Put Them In The Ground pareciera conjugarse de la manera adecuada,
creando un tema rescatable y que debería de ponerlos en una situación favorable
en algún momento, con ritmos adictivos y coros tan cacofónicos que alcanzan
niveles de trance bastante interesantes, fabulosos, aunque la inercia se rompe
un poco con temas más densos y desastrosamente ambiciosos como Jesus Was a
Stoner, que a pesar de presentar cierto elemento disruptivo no alcanza a
embonar del todo en algo realmente propositivo, y sólo desvía a la banda hacia
una dirección poco deseable que continua en Pass The Knife, en dónde a pesar de
crear una atmósfera interesante, nos quedamos solo con una estupenda forma sin
el fondo necesario.
Pero bueno, no todo está perdido y la banda consigue un
momento realmente mágico con la evocativa Oh Na Na que consigue conjuntar lo
mejor de la banda en algunos minutos, un tanto derivativa por segundos, que me
recuerda bastante a ese disco grabado por Damian Marley y Nas, pero que la
banda apenas consigue imprimirle su sello personal para salir avante, yendo aún
más profundo en Locos, que pareciera centrarse precisamente en el contexto que
los hizo famosos hace años, rimas a coro, ritmos lentos, simples pero sólidos y
sampleos diseñados para alterar la percepción, como en viaje de
autodescubrimiento, la banda consigue encontrarse al final, aunque
probablemente las rimas en español no permitan la mayor trascendencia del tema,
Elephants On Acid es un buen esfuerzo, disfrutable y que vale mucho la pena
escuchar, nos deja claro que la banda no decepciona, pero de ahí a esperar la
próxima revolución del “latin lingo”, eso ya queda muy lejos de sus
posibilidades.
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