Más Peligroso que el PRI
Más Peligroso que el PRI
Dispersión Caprina
Por: Erreh Svaia
En el primer acto, de una obra muy mala, vimos a un partido,
Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), con mayoría en el Senado y
convertido en el actual partido en el poder, negarse rotundamente a otorgar
licencia al hoy Senador, ex Gobernador de Chiapas, Manuel Velasco del Partido
Verde Ecologista de México (PVEM) para convertirse en el “sustituto” interino
de sí mismo (empieza aquí el surrealismo), lo que parecía una decisión
“diferente”, completamente congruente con la posición opositora que Morena
ejerció durante la anterior legislatura, en cuestión de una horas se convirtió
en la gran decepción para muchos, que votaron en Julio por una opción que veían
como “diferente”, aquellos que hace menos de una semana prestaron protesta para
defender los intereses de la nación y servirle, dieron una muestra más de que los
únicos intereses que buscan salvaguardar son las de su partido y líder, en un
viraje desconcertante, aquellos que se oponían, se alinearon rápidamente al
cambio de señal, obviamente dictado por la cúpula del partido, Ricardo Monreal,
diestro operador y sumiso seguidor rápidamente alteró su postura y ofreció un vergonzoso
discurso a favor de otorgar licencia a Velasco, la verdadera naturaleza del hoy
partido en el poder fue rápidamente revelada, algo que no debería ser sorpresa
para los que hemos observado a Morena “recogiendo” a los viejos aliados del Partido
Revolucionario Institucional (PRI), el Partido del Trabajo (PT) y el Partido
Encuentro Social (PES), ayer tocó el turno de aliarse con un ex aliado más del
PRI, el PVEM (oportunista comparsa de aquellos en el poder el Partido Acción
Nacional, PAN, el PRI y ahora Morena), para consolidar una posición nada distante
del antiguo partido en el poder, aquella anunciada con bombo y platillo “cuarta
transformación”, que al final no significó nada más que una frase bonita que
vender a los electores (ya que el mismo Andrés López convocó a estudiantes de Ciencia
Política definieran algo que el vendió sin mayores explicaciones a sus ilusos
seguidores), resulta ser algo muy parecido a una cuarta transformación de la
vieja “dictadura en el poder”, descrita por el Premio Nobel Mario Vargas Llosa,
o tal vez peor, ya que Morena, un partido que ahora parece sumar la esencia
autoritaria, hegemónica y corporativista del viejo PRI, suma uno a uno a los
aliados del nuevo PRI (Alfonso Romo, PT, PES, PVEM, Elba Esther Gordillo, etc.)
y se convierte en una amenaza mayor para la incipiente vida democrática del
país.
Hoy la “cuarta transformación del país” se revela realmente
como la cuarta transformación del PRI, ésta vez bajo el nombre de Morena, vemos
a uno de los artífices principales del viejo PRIísmo, Porfirio Muñoz Ledo,
asumir la presidencia del Senado, vemos a uno de los miembros claves del viraje
hacia el “nuevo PRIísmo”, Manuel Bartlett asumir la titularidad de la Comisión
Federal de Electricidad, vemos a oportunistas de pasadas administraciones como Alfonso
Romo, sumar a Morena como su tercera oportunidad política (antes estuvo aliado
con el PRI y con el PAN), y a su vez vemos a un Morena formar un conglomerado
de corrientes tan dispares como las que habitaron en el PRI, y que se volvieron
“corrientes políticas” dentro del Partido de la Revolución Democrática (PRD),
vemos las mismas viejas prácticas de complicidad empezar a darse dentro de
Morena y reflejadas ayer en el Senado, la conveniencia política, el
oportunismo, la complicidad, y no asusta ni sorprende ver lo que esperábamos que
sucediera, lo que era obvio que pasaría, lo que muchos ilusos negaron hace unos
meses, y que ayer se tragaban el anzuelo, y hoy, hoy sólo callan, a la espera
de una nueva señal que venga de arriba para justificar lo injustificable, para
soportar la vergüenza y tragar más porquería, incapaces de aceptar su error,
esa vergüenza y esa terquedad es la que no les deja ver que han votado por un
anzuelo, no por una esperanza, no por un cambio, han votado por una
reconfiguración de la “dictadura perfecta”, una que puede ser peor, ya que ha
aprendido de sus errores pasados y que hará hasta lo imposible por conservar el
poder, atrás han quedado las ideologías, las izquierdas, las derechas, hoy sólo
hay el deseo de mantener el poder a toda costa, sin vergüenza, sin pena,
perpetuarse en el poder es la consigna, dar y recibir favores para fortalecer la
complicidad es la tarea, lo que vimos ayer es digno de una película del director
de cine Luis Buñuel, surrealismo puro, una desilusión más para aquellos que buscaron
“sacar” al PRI del poder, pero que fueron tal ilusos al pensar que un ex PRIísta
los iba a salvar del PRI, ya pasó en Nuevo León, ahora pasa a nivel nacional,
no aprendemos, para que haya desilusión se requieren ilusos en primer lugar, si
parece PRI, actúa como el PRI, y se mueve como el PRI, no lo dudes, es el PRI,
se llame como se llame.
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