Teocracia Light, Una Religión de Estado
Teocracia Light, Una Religión de Estado
Por: Erreh Svaia
Dispersión Caprina
De acuerdo al libro God and Donald Trump (Dios y Donald
Trump) escrito por Stephen E. Strang, varios líderes evangélicos conservadores
(Jerry Falwell entre ellos) en los EEUU afirmaron la existencia de un poder
sobrenatural actuando durante las elecciones presidenciales y favoreciendo al
candidato Donald Trump por encima del mal, representado por la candidata
Hillary Clinton, de esta forma afirmaron que Trump era un “enviado de Dios a
los EEUU para guiar al país en tiempos de crisis”, la película The Trump
Prophecy (La Profecía de Trump) documenta como varios seguidores de Trump lo señalan
como el hombre destinado a restaurar los “valores morales de América”, en ésta
película, uno de los protagonistas afirma escuchar la voz de Dios mientras
cambiaba de canales y aparecía en el televisor Donald Trump, “éste es el
próximo presidente de los EEUU”, Dios supuestamente le indicó, para muchos de
éstos fanáticos, el ex presidente Barack Obama es también la representación del
mismismo demonio, y el “milagro” del triunfo de Trump implica el castigo y
encarcelamiento de Obama, además de la captura de un círculo de “pedófilos
satánicos” infiltrados en el Partido Demócrata, a quienes Trump también castigará,
además de liberar las curas contra el cáncer y el Alzheimer, secuestradas por
la demoniaca industria farmacéutica, suena como un alucinante relato de ficción
imposible de creer, pero no es así, los fanáticos de Trump en los EEUU abrazan
la batalla épica entre el bien y el mal que libra su presidente, y más allá de
reconocer las fallas del narcisista autoritario color naranja, están dispuestos
a “perdonar” sus fallas ya que son culpa de sus adversarios.
En México, el excéntrico Padre Solalinde señala que el hoy
presidente Andrés López “tiene mucho de Dios”, durante su campaña, pudimos ver
al entonces candidato tomarse fotografías en las que a sus espaldas aparecían
figuras religiosas, su partido Morena no sólo evoca el color de piel de la llamada
“raza de bronce”, también es una clara referencia a la Virgen de Guadalupe (registrándose
como candidato a la presidencia el 12 de Diciembre), Elena Poniatowska, una de
sus partidarios le señala como un “socialista Guadalupano”, mientras que
Bernardo Barranco, estudioso del fenómeno religioso le señala en su columna
como “El Candidato de Dios” para un sector de los votantes en un fenómeno que
va más allá de lo político e ideológico, llegando hasta lo religioso causando
una inusual devoción entre sus fanáticos que quieren tocarlo en su mítines
políticos, además de la existencia de objetos de culto y adoración como
veladoras con su imagen, a lo que López no hace caso omiso, sino al contrario,
usa éstas imágenes como parte de su “política”, abarcando temas como el perdón,
el amor, la reconciliación y la esperanza, convirtiendo la fe en un activo
político, no sorprende que el pastor evangélico Lenin Aguilera afirme que “Dios
esté actuando a través de López”, o que gran parte de los Demócratas Cristianos
como Manuel Espino, Germán Martínez, Bernardo Bátiz, antes parte del Partido
Acción Nacional, se hayan sumado al partido de López, o que el Partido
Encuentro Social (de ultra derecha), presidido por el pastor pentecostés Hugo
Erick Flores, haya formado una alianza con Morena.
En Brasil el primero de Enero tomó cargo como presidente
Jair Bolsonaro como candidato de la ultra derecha en Brasil, Bolsonaro, un
católico nacionalista (por tercera vez el factor religión y el nacionalismo
unidos), ya de entrada la afirmación electoral de Bolsonaro es temeraria “Dios
por encima de todo”, ya también podemos escuchar las voces del fanatismo
señalando que “Dios intervino para el triunfo de Bolsonaro”, con afirmaciones
alucinantes como la de su ministro de Asuntos Exteriores, Ernesto Araújo
señalando “el regreso de Dios a Brasil” gracias a Bolsonaro, con un Bolsonaro
como “soldado de Dios”, liberándolo para hacerse presente nuevamente en la
nación Sudamericana, “Dios era un esclavo del socialismo y hoy es libre gracias
a Bolsonaro”, ese es el nuevo evangelio político de la ultra derecha en Brasil,
y lo trágico es que esto no sólo sucede en Sudamérica, también está pasando en
México y en los EEUU, en dónde parece que el ciudadano común aterrado ante la
incertidumbre moderna se siente abandonado por la política tradicional, se
siente abandonado por los partidos políticos de derecha o izquierda tradicionales y lejos de encontrar
razones, busca en quien depositar su fe, pudiéramos hablar de un Papa Francisco
que ha perdido presencia, que no ha podido remontar de manera convincente las acusaciones
de ocultamiento en casos de abuso por parte de sacerdotes y una necesidad
humana de creer en algo, así sean políticos que empiezan a usar la figura de
Dios como bandera política para ejercer una versión bizarra de religión, virtud
y moral emanada del Estado, algo no muy lejano al tándem político- religioso de
Vladimir Putin y el patriarca Kirill, líder de la Iglesia Ortodoxa Rusa.
Comments
Post a Comment