Comediantes

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Dispersión Caprina

Por: Erreh Svaia

Han resultado más peligrosos los ultra nacionalistas blancos, que los "invasores musulmanes", (En unos cuantos meses pasamos de la "Sumisión" a la "Seratonina", según la narrativa del genial escritor francés Michel Houellebecq) no sólo en Europa, incluso en Nueva Zelanda, luego del horroroso espectáculo snuff que vimos hace una semanas en Facebook, y que la Primera Ministra Jacinda Ardem manejara de una manera espectacular, como pocas veces hemos visto resultas ese tipo de crisis, aun así, el mundo sigue volviéndose un lugar peligroso a medida de que los blancos ultra nacionalistas siguen tomando desesperadas resoluciones, y el extremismo y fundamentalismo de derechas sigue creciendo y envenenándose con el nacionalismo, alguien me dijo muchos a los atrás, décadas tal vez, "los europeos son muy nacionalistas, olvídate de la Unión Europea, no pasará mucho tiempo antes de que las divisiones regresen", y parece ser que esa persona tenía razón, la visión supranacional de Europa se tambalea como nunca a medida que crece la ultra derecha en Alemania, con una canciller Angela Merkel más debilitada que nunca, y con un Emmanuel Macron acotado, percibido como incapaz de cumplir con sus grandes promesas de campaña, en medio del surgimiento de unos "chalecos amarillos" cada vez más radicales, alimentado por igual por la izquierda radical de la sofisticada ideóloga Chantal Mouffle, o del épico ideólogo de ultra derecha Alain de Benoist.

Europa más que nunca aparece dividida entre un diminuto brote liberal, luego del sorprendente triunfo de la abogada y activista Zuzana Caputova en Eslovaquia, la primer mujer en ser electa para ese puesto en aquél país de Europa del Este, que sin duda deja una nota de esperanza en el mismo corazón de Europa, aunque en los Países Bajos, una de las naciones más vanguardistas del viejo continente (y  definitivamente un laboratorio político de avanzada), y donde pareciera dictarse la dirección a seguir y las futuras tendencias de la UE, el liberal Mark Rutte, ha sido fuertemente derrotado por el inusual "intelectual" ultra conservador Thierry Baudet, del partido Foro para la Democracia, si de algo es señal esto, muy seguramente lo es de que Europa seguirá "quemando libros" como en la cada vez más conservadora y nacionalista Polonia, en donde la ultra derecha nacionalista sigue volviéndose más y más radical, esperemos que no terminen castigando el adulterio y la homosexualidad como en Brunei, con la muerte a pedradas.

¿Pero qué tan nacionalista puedes ser (a pesar de los constantes esfuerzos de Steve Bannon por crear una especie de Internacional Populista de Ultra Derecha) cuando en la Italia gobernada por una coalición de la Liga y el Movimiento 5 Estrellas, que abre de par en par las puertas a China (y a las enfermedades contagiosas con su desdén por el sistema de vacunación), como nunca se había hecho antes? ¿Qué tan nacionalista se puede ser, cuando tanta división, en lugar de fortalecer a Europa, la debilita y la pone de rodillas ante una China y una Rusia (principales agentes del capitalismo más salvaje sobre el planeta) que sin duda aportarán fuerte para dividirlo aún más y obtener provecho para poder imponer su moderno capitalismo autoritario, que parece ser otra de las tendencias a imponerse desde Asia, abriéndose paso al resto del mundo?

En las listas de "popularidad" política en el mundo, hoy vemos a personajes terribles como Rodrigo Duterte de Filipinas, Jair Bolsonaro de Brasil, Vladimir Putin de Rusia, Recep Tayyip Erdogan en Turquía y Andrés López de México, personajes con un marcado desdén por la democracia y las instituciones, anti globalistas y ultra nacionalistas, con un pragmatismo político que los lleva más allá de la izquierda o la derecha, por suerte, hemos visto que el autoritario gobierno de Erdogan ha recibido un fuerte golpe en días y en elecciones recientes, con una contundente caída en la votación a favor de su partido, el cual ha perdido casi todas las votaciones en las grandes ciudades de aquel país, y se estima siga debilitándose a medida que la sociedad siga madurando y vaya comprendiendo que el autoritarismo y la pérdida de libertades y derechos no es la respuesta a la incertidumbre que parecemos vivir hoy en día, Moisés Naím, lo señalaba en su libro El Fin del Poder, al cual es más fácil llegar hoy en día, pero pareciera volverse cada vez más difícil retenerlo.

A medida que empieza a crearse una suerte de desgaste en la era de los 'bad hombres", que se vislumbra con el futuro político de Vladimir Putin, el miedo gordiano del Brexit y la tambaleante reelección de Donald Trump, pareciera vislumbrarse una reacción a éste drama político, iniciado años atrás por gente como el líder del populista Movimiento 5 Estrellas, el comediante Beppe Grillo en Italia, que saltó de la comedia televisiva, a la arena política, o el comediante guatemalteco Jimmy Morales, quien fuertemente respaldado por el cada vez más prominente movimiento evangélico en América (detrás de Trump, Bolsonaro y López), logró alcanzar la presidencia de un país desgastado por los desvaríos de izquierdas y derechas, el caso más reciente lo tenemos en Ucrania, con el triunfo en la primera vuelta del comediante Volodymyr Zelenskiy, famoso por interpretar a un singular presidente en una comedia televisiva en aquél país, y que hoy pareciera tener contra las cuerdas al actual presidente Petro Poroshenko, quien a pesar de varias controversias ha conseguido mantener a raya la invasiva intervención rusa.

¿Será que ya nos hemos cansado de los dramas épicos de los “bad hombres”, y estemos más desesperados que deseosos por las bromas crueles de los comediantes o “killer clowns”? ¿Alguien se acuerda de los supuestos avistamientos y apariciones de payasos tenebrosos que circulaban en Internet hace unos años? Parece que eran una profecía de lo que está pasando, pareciera que Stephen King construyó la metáfora perfecta para éste “Zeitgeist”.