Johnny Marr- The Messenger (2013)

Johnny Marr- The Messenger (2013)

Johnny Marr definitivamente merece una mención aparte como uno de los grandes guitarristas poco reconocidos en los 80s, aún en su propio ambiente, los Smiths siempre serán más reconocidos por los bostezos apáticos de Morrissey y su ambigüedad sexual, que por el florido y exótico trabajo de guitarra de Johnny Marr para el grupo y es que los Smiths pudieron ser muy pop y lo que sea, pero antes que nada eran una banda de rock con los ritmos de Bo Diddley y la guitarra de Marr que fácilmente podía captar el salvajismo de un James Williamson de los Stooges y la fineza de un Nile Rodgers de los Chic.

The Messenger podría ser la primera entrada de Marr al mundo del rock completamente bajo su nombre, esta vez sin ser parte de otro grupo o sin grupos de apoyo, Marr demuestra que sigue siendo una llama vigente en el mundo del rock y que su guitarra, si bien esta vez suena con más filo que exotismo es digna siempre de tomarse en cuenta.

The Right Thing Right arranca con algunos acordes que bien pudieran haber sido extraídos de algún momento inspirado de los Smiths, aunque de inmediato acelera la operación y lo vuelve algo con un ritmo más dinámico, la guitarra de Marr suena renacida, sin su típico florido lenguaje, sino más inclinado a un tono más abrasivo, que nos habla de un Marr más maduro, más directo, que se comunica mejor sin tantos rodeos.  

I Want The Heartbeat posee una maravillosa e intrincada guitarra que si bien a nadie le recordará a los Smiths, esto no será necesario para disfrutar esta pieza que se debate entre el post punk más explosivo y la new wave más dinámica, en un tema que sin duda es de lo más brillante del disco.

Para European Me, Marr y su guitarra me recuerdan más a The Cure que a los Smiths, aunque Marr rápidamente corrige y nos dirige un poco más a la época en que Morrissey idolatraba a los iconos pop de los 50s y se metía flores en la bolsa trasera de sus jeans, en un tema para alucinar un poco con esas guitarras que parecen flotar muy alto sobre nosotros.

Upstarts es un tema que me deja pensando ¿Por qué nunca se pudo dar la colaboración entre McCartney y Marr, sin duda Marr posee parte de la ecuación que pudieran dar a “McCas” oxigeno de sobra, con un pop inventivo y furioso, para muestra este tema que posee partes clásicas e inventivas de un buen pop aguerrido, mientras que Lockdown, a pesar de su tono bajo, podría ser un tema que bien pudo ser versionado por los Ramones con buenos resultados.

Si hablamos de Marr, sería imposible omitir a Morrissey, su contra parte en los legendarios y ya mencionados Smiths, y es que muy a mi gusto Morrissey ha presentado una inclinación a hacer discos más dinámicos y más subversivos en los últimos años, las guitarras corrosivas, los ritmos duros y los sintetizadores disonantes de You Are The Quarry, The Ringleader Of the Tormentors y muy en especial de Years of Refusal, con este último sonando casi punk, en gran parte gracias a la sabia elección de productores, el tiempo ha ido haciendo sabio al testarudo de Morrissey, y parece que Marr ha sabido mantenerse en forma y con filo a pesar de los años de constante inactividad, una ecuación que nos pudiera dar como resultado la soñada por muchos, colaboración de estos dos, alguna vez cómplices de un gran crimen que todos anhelamos.  

The Messenger es precisamente un tema en el que Morrissey bien podría encajar (a pesar del sobre peso), sin sonar a un acto de nostalgia y con miras hasta a sonar relevantes, en una época en que todos su contemporáneos han dejado de serlo, si claro, Robert Smith y sus The Cure han sabido continuar haciendo discos dignos y relevantes, aunque ya no hagan nada espectacular, pero el vibrante sonido de la guitarra de Marr y la inclinación de Morrissey de atreverse a experimentar pudiera estar dándonos mensajes de algo que podría ser, y ser bien.

Recuerdo ser criticado por escuchar a los Smiths en los círculos “heavymetaleros” en que solía reunirme, dónde Black Sabbath, Iron Maiden y Metallica solían ser la regla en cuanto a escuela de riffs se refiere, pero una escuchada a The Messenger y reto a cualquiera a que me niegue que este es un gran disco de guitarras y prueba de que a Marr no lo puedes descartar.