Hair Police-Mercurial Rites (2013)

Hair Police-Mercurial Rites (2013)

Extraño bastante a los Wolf Eyes, por muchos años una de mis bandas favoritas, y cuidado con llamarlos noise, si bien, el ruido era un elemento, justo era decir que la banda tenía más en común con una banda de dub, techno o free jazz, que con el Merzbow más salvaje o Carlos Giffoni en sus inicios, prueba de ello sus gloriosas colaboraciones con gente como el GRAN Anthony Braxton o Richard Pinhas aka Heldon, pero bueno, en años recientes poco o nada hemos sabido de los Wolf Eyes, sabemos que este año estarán de regreso, pero la verdad les extrañamos bastante, aún y que discos de John Olson, Nate Young y Mike Connelly por separado se han seguido editando de manera constate, pero ya es tiempo de otro gran disco en la tradición de clásico Burned Mind o el horripilante Human Animal.

Hair Police es algo así como el hermano bastardo de los Wolf Eyes, aunque con más conexiones al mundo del rock vía una estupenda sección rítmica, capaz de llevar los experimentos más atonales a territorios no tan abstractos, aunque hay que observar aquí, que Mercurial Rites, su más reciente grabación, ya con un Mike Connelly desligado de los Wolf Eyes les muestra abandonando el rock que pudieron anidar en Certainty Of Swarms, yéndose a territorios más extravagantes y personales, en dónde las percusiones se vuelven más pausadas y abiertas, y los sonidos adquieren características enigmáticas respecto a sus orígenes, en We Prepare podemos percibir poderosas resonancias metálicas, y las voces más malévolas y enfermas de la historia de la música moderna, haciendo claro eco al black metal, uno de los obvios intereses de estos Hair Police y por supuesto de los Wolf Eyes, la banda se dedica a crear sonidos y los nutre de una atmósfera para que estos resuenen y se hinchen ante nuestros oídos, crean una densa capa de ecos los cuales desgarran a través de feedback electrónico, arropándose en estática pura al más fiel estilo del free jazz.

The Crevice suena a lo que el GRAN Bukowski llamaba “música de cañerías”, al tiempo que guitarras crujen de maneras in imaginadas, llevándonos a universos terroríficos de sonido, los cuales adquieren nuevas dimensiones de abstracción al serles extraído cualquier ritmo reconocido posible, los Hair Police consiguen aún así traernos un detallado ejercicio de sonidos extremos, pequeños guiños y “glitches” electrónicos que transforman a este banda en el extremos sonoro al que Lou Reed aspiró alguna vez con sus Metal Machine Trio, aunque mil veces más bestiales de los que Reed pudiera imaginar.

Thiefs Spring nos muestra una identificable guitarra eléctrica muy al estilo del legendario Jandek, aunque aquí la banda lleva esas cuerdas fantasmales al extremo sonoro, combinándolas con un sin fin de zumbidos electrónicos provenientes de prominentes sintetizadores distorsionados, si, claro, estamos ante un nuevo universo sonoro para muchos, una puerta a otras dimensiones de dolor y brutalidad, ¿Serán los Hair Police los nuevos Wolf Eyes? Más enfermos que cerebrales, tal vez, y podrán serlo por un tiempo hasta que los WE decidan regresar.

The Scent me recuerda aquel legendario tema de los Hellhammer, Triumph Of Death, en dónde Thomas G. Warrior recreaba lo que era el último aliento de un hombre enterrado vivo, aquí las monstruosas vocales de Connelly nos ponen la piel de gallina y el cabello de punta, en una especie de tortura sonora que podría encontrar su paralelo en la atmósfera de calabozo y tortura de los legendarios Abruptum, alimentando nuestras mentes con imágenes de Connelly siendo sometido a terapia de electro choques.

Dilate And Inhabit posee una primitiva versión de algo que bien podría ser un soundtrack de película de terror, con una lejana y simplista percusión repetitiva, explosiones ligeras de sintetizador que electrizan el ambiente y una guitarra fantasmal que deambula entre nosotros desde el más allá, mientras que Dusk Misplaced podría ser lo más cercano a un paisaje sonoro por parte de la banda, aunque con su característico halo de incomodidad.

Un disco diferente que tomará desprevenido a más de un fan de estos Hair Police, pero sin duda un importante avance en el enriquecimiento de las técnicas usadas y el resultado final, los Hair Police buscan, y encuentra nuevos sonidos, y lentamente los van integrando al tiempo que ellos mismos van transformándose en algo más, como una letal serpiente que solo muda su piel, pero conserva su veneno, y en este caso, me gusta bastante la nueva etapa en la que se adentra la banda.