QAnon y Una Imaginación Desbordada

QAnon y Una Imaginación Desbordada

Por: Erreh Svaia

Dispersión Caprina

El mundo de las conspiraciones es amplio y vasto, casi todo lo que sucede puede ser sujeto a miles de explicaciones, quien haya visto Rashamon del tremendo Kurosawa entenderá como podemos ir creando nuevas versiones del mismo hecho, y yendo aún más si aplicamos algo de imaginación y suspicacia, diría el filósofo Jacques Derrida: “Lo relevante de la mentira no es nunca su contenido, sino la intencionalidad de quién miente”, incluso Derrida se va a la yugular contra las traducciones agregando que: “La traducción es una escritura productiva, inspirada por el texto original”, si quisiéramos evadir esas interpretaciones inexorablemente personales, tendríamos que apegarnos a otra máxima de Derrida: “No hay nada fuera del texto”.

“QAnon” es la más reciente conspiración rondando a Donald Trump y a la llamada “Alt Right” en los EEUU, “Una conspiración para dominar el resto de las conspiraciones”, la supuesta filtración de información a través de esos controversiales, anárquicos e imaginativos portales como 4chan o 8chan, supuestamente hechos por un alto oficial de gobierno, liberados en forma de “migajas de pan” y puestos a disposición del público “panaderos” para su armado en forma de teorías más o menos coherentes, a éstas publicaciones, algunas de ellas en claves totalmente abiertas a interpretación se suman videos y la más reciente provocación, camisas con la imagen de “Q” apareciendo en los mítines de Donald Trump.

La conspiración retoma esos viejos y obsoletos temas del “Pizzagate” y la pedofilia, parecería que la “pedofilia” se ha convertido en el nuevo satanismo/comunismo y se usa ampliamente para buscar incriminar a personajes con fines de obtener una ventaja sobre ellos y de convertirlos en monstruos ante la opinión pública, la teoría conspirativa de “QAnon” señala en un giro un tanto cómico que la supuesta rivalidad entre Trump y su fiscal Robert Mueller, concerniente en la investigación del segundo sobre la implicación de Rusia en las elecciones que llevaron a la victoria del primero, es sólo una “cortina de humo” para ocultar el trabajo en equipo de ambos con el supuesto fin de descubrir y nulificar una red de pedófilos en los EEUU que incluyen a personajes como Hillary Clinton, Barack Obama, el actor Tom Hanks y la empresa cementera mexicana Cemex.

Bajo la premisa de “QAnon”, Trump y Mueller atraparán a todos éstos “infractores” y los llevarán a la cárcel de Guantanamo, derrotando al llamado “Deep State” o “Estado Profundo” y propiciando el triunfo final del ejército norteamericano (que respalda al 100% a Trump, supuestamente) contra todos éstos criminales de estado, cuya base es precisamente una las instalaciones de la cementera mexicana-transnacional como centro de operaciones ¿Suena alucinante? Claro ¿Un “ataque artero” contra el cada vez más indefenso Partido Demócrata cuyo liberalismo se ha convertido en una doctrina cuasi fallida debido a su interés desmedido en temas de genero e identidad? Posiblemente, ya Mark Lilla ha manifestado en varias ocasiones los errores que han llevado al Demócrata a su debacle en las elecciones, tomando un poco las palabras de Derrida, sería interesante saber quién se beneficia con la debacle Demócrata y posiblemente ahí tengamos la respuesta de dónde provienen éstas “ideas” o rumores, la creación de una mitología alrededor de Trump que lo coloca sobre un ser casi heroico luchando contra fuerzas casi del más allá.

Sólo una mente bastante descarrillada podría poner tanta atención en el armado de semejante historia fantástica, un posible deseo de reconstruir la imagen de Trump y de reposicionarle más allá de los círculos de gobierno y económicos, una suerte de cortina de humo para ocultar una inflación y un nivel de desempleo que crece, un país que se divide, un Partido Demócrata incapaz de reinventarse y una obvia intervención rusa en los procesos electorales en los EEUU que pareciera ser interés de alguien desmentirlos.

“QAnon” se convierte nuevamente en una de esas teorías de conspiración que parecieran materializarse en el consciente popular y que pudieran superar casi cualquier guion de película de Hollywood, incluso esas protagonizadas por Tom Hanks ¿Cemex? Vaya manera de inmiscuir a una de las empresas mexicanas más exitosas a nivel mundial, fruto de la globalización, se puede considerar al mismo proteccionismo detrás de Trump como uno de los impulsores de esta imaginativa teoría, interesante sí, pero poco factible ¿Dónde andan David Icke o Alan Moore estos días?