Deep Purple-Now What?!
Deep Purple-Now
What?!
“Me causa gran placer ver que la terquedad de un inconformista
incorregible sea aclamada tan cálidamente”
Albert Einstein
Interesantísimo saber que después de tantos años en el
negocio, los Deep Purple sigan sabiendo lo que es rockear duro, golpear directo
al hueso con contundencia y que los años parecieran confirmar solamente lo que
muchos ya sabíamos, lo que hacen, lo hacen mejor que nadie y no hay motivos
para cambiar, eso sí, sonando bastante revitalizados con el apoyo del gran
Steve Morse en las guitarras, quien con su propio estilo ha conseguido llenar
el hueco nada fácil de cubrir, dejado por genios como Ritchie Blackmore o Tommy
Bolin.
De entrada nos sentimos casi como en casa al escuchar las
vocales del incomparable Ian Gillan, llevándonos de la mano en A Simple Song, encargada
de abrir este disco, Gillan quien a pesar del paso el tiempo suena tan
imbatible como en el pasado suena como el gran veterano que es, y la banda que
le acompaña esta ves consigue dar a la perfección ese efecto épico y progresivo
a sus composiciones como en el pasado, demostrando que no todo eran los
brutales rasgueos que sabían dar sus contemporáneos, como los Sabbath o los
Zeppelin, en la obra de Deep Purple siempre fue notorio un elemento de
intelectualidad exacerbada, e incluso un profundo estudio de las estructuras de
clásicos como Bach (principalmente por parte de Blackmore o del incomparable
Jon Lord).
La aportación de Morse ha resultado fundamental para dar
solidez al sonido actual de la banda, convirtiéndose en un elemento tan indispensable,
como en su época fuese la guitarra de Blackmore, mostrando una asertiva
precisión tan notable en los arreglos de Weirdistan, así como en los brutales
rasgueos que suele intercalar e intercambiar con sus compañeros, algo que
resulta una verdadera delicia, si a estos sumamos las incursiones acertadas de
Don Airey, quien aporta toques
progresivos al contundente sonido de la banda, entregándonos un tema estupendo
de principio a fin, y es precisamente Airey quien se encarga de conjurar la
clásica introducción al siguiente tema, Out Of Hand, con una ejecución estelar
nuevamente por parte de Morse, quien consigue hacer una muy buena mancuerna con
Ian Paice y Roger Glover, con un Glover contundente y un Paice siempre enorme,
que extrañamente en estos temas siento, nos queda a deber un poco, si lo
comparamos con su asombroso trabajo en los discos clásicos de la banda.
Hell To Pay suena mucho
Deep Purple clásico, no hay duda que aquí la banda alcanza a recrear
parte de esa magia clásica que tuve en los 70s, y esto principalmente a la
estelar ejecución del enorme Gillan, fuertemente apoyado por Morse en todo
momento, quien hace a un lado la sutileza y la cambia por una fuerza prodigiosa
en sus líneas, perfectamente coordinadas con el trabajo de Glover, y es
precisamente en esta pieza en dónde Morse impone su magia, otorgándonos de la
mano de Airey, algo muy cercano a la magia de la vieja mancuerna que solían
hacer Blackmore y Lord, segundas partes nunca fueron buenas, estoy de acuerdo,
pero en el caso de Purple este Now What?! No representa una reunión, un
reencuentro, sino una continuación y una evolución de trabajo de décadas atrás
de la banda, y vaya que esta banda ha encontrado en Morse y en Airey dos
elementos que aportan y mucho a la contundencia de la banda.
En el pasado siempre vi a Ian Paice como uno de los pilares
de los Purple, su estilo frenético en la batería sin duda rivalizaba con los
grandes de la época, como el gran John Bonham, aunque mientras Bonham era
poderoso y duro en su ejecución, Paice denotaba un estilo muy estudiado
ejecutado a velocidades prodigiosas, en este disco, Paice suena un tanto
pausado para mi gusto, aunque su trabajo en Body Line probablemente es de lo
mejor a lo largo del disco, recuperando algo del dinamismo de antaño.
Alguna vez considerada una de las bandas más estruendosas
del planeta, los Purple deciden aquí no echarse hacia atrás con esa reputación
y confirmarla con temas épicos como Apres Vous o Above and Beyond que no sólo
disparan los decibeles, sino que confirman también a la banda como precursora
del genero progresivo en general, mientras que Blood From a Stone podía
considerarse un heredero de aquellos desbordantes tintes dramáticos alcanzados
por la banda en temas como el clásico Child In Time, con un Gillan asumiendo el
protagonismo casi total de la pieza.
Los Purple se dan la oportunidad de experimentar un poco en
un tema como Vincent Price, que pareciera que Gillan se haya sacado del baúl de
los recuerdos en su época como vocalista de Black Sabbath (con quienes grabó un
enrome e incomprendido disco), con esa atmosfera de suspenso y esos rasgueos
monumentales de Morse.
Now What?! Es un asombroso documento de una banda que muchos
ya dan por olvidada, pero que en realidad nunca han parado de hacer música,
resulta admirable la forma en que esta banda se encuentra y de su deseo de
hacer música de altos decibeles sin dormirse en sus laureles, Gillan, Paice y
Glover suenan tan hambrientos como en sus mejores épocas, Airey hace un trabajo
espectacular añadiendo su propio estilo a la banda y hay que resaltar la
tremenda aportación de Morse a la banda aportando la columna vertebral de este
disco, un disco que resulta espectacular y cuyos méritos se van a las nubes si
tomamos en cuenta que los Deep Purple llevan casi 5 décadas procurándose un
altísimo nivel de excelencia en sus creaciones musicales.
No he escuchado Now What?!
ReplyDeleteEntre tanta oferta que hoy tenemos en materia musical recuerdo haberle dado una pasada a un par de temas de este disco y haberlo dejado ahí. Gracias por comentarlo, lo recuperaré. Ese tema Vincent Price me sorprendió, suena muy Ozzy !!!
Saludos!
Esteban
http://politomusica.blogspot.com
A mi me sorprendiò, que nivel traen estos cuates!
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