La Máquina de Gobernar de Allende

La Máquina de Gobernar de Allende

Por: Erreh Svaia

Dispersión Caprina

Mientras Marx hablaba de una economía centralmente planificada, Hayek mencionaba la dificultad para poder no sólo contar con la información de esas incontables variables, así como del conocimiento suficiente para entender a los mercados, para los nefastos seguidores de Marx no se trataba de entender a los mercados, sino de como “dominarlos”, para los más nefastos seguidores de Hayek, sólo se trataba de dejarlos libres, sin restricción alguna, ni los excesos de control ni el libertinaje parecerían una solución sensata a la cuestión de la ejecución económica, aún y que Keynes trató de establecer teorías sobre medidas de control menos impositivas, pero igual de fraudulentas que promovían pequeñas mejoras a largo plazo a cambio de grandes desequilibrios en el largo.

Salvador Allende fue el primer presidente socialista democráticamente electo en América, para muchos Allende era una suerte de “Che Guevara” y Fidel Castro en uno sólo, pero versión Chilena, para otros, un hombre extraído del Marxismo que había entendido las señales de Eduard Bernstein respecto al socialismo democrático, difiero en el pensamiento de aquellos que consideran a Allende un seguidor fiel del pensamiento Soviético o Castrista, dentro del contexto de la economía centralmente planificada, Allende buscaba superar el choque inicial que había tenido con los mercados, sabía que su plan detonado con la nacionalización de varias industrias claves no sería una solución, y sabía aún más, que en el corto plazo la incapacidad para controlar las variables económicas le estallaría en las manos (finalmente le estalló, le faltó tiempo), por ello su siguiente plan era desafiar el concepto de controlar, para poder llegar a “entender” esas variables y poder actuar con la visión anticipada necesaria.

La cuestión era como poder obtener información en tiempo real y como poder crear escenarios que recrearan los efectos de cada una de esas variables afectadas por cada una de las decisiones a tomar, para ello Allende y uno de sus ministros Fernando Flores, contactaron a Strafford Beer, un inglés experto en una entonces oscura disciplina conocida como “cibernética”, al igual que Milton Friedman años más tarde, Beer saltó de inmediato emocionado ante la oportunidad de poner en acción sus teorías respecto a la información, el procesamiento de ésta, la creación de escenarios y la posibilidad de influir en ellos, en aquellos años, semejante visión se antojaría imposible, y se inclinaría hacia el juicio emitido por Hayek, hoy en día, si hablamos de sistemas de “predictibilidad” desarrollados mediante algoritmos por empresas como Facebook, Amazon y Google, la balanza se hubiese podido irónicamente inclinar hacia Beer y Allende.

Synco, o sistema de información y control fue la idea concebida por Beer para su implementación en el naciente Chile socialista de Allende, un sistema que obtenía información en línea de cada uno de los generadores productivos (muchos años antes de la llegada de Internet) capaz de presentar esa información a mandos medios, capaz de crear varios escenarios resultantes para la toma de decisiones, además de “termómetros” capaces de medir las emociones, como alegría o tristeza de los operantes y afectados, todo ello (Big Data) ligado a un mando superior en el cual aquellas situaciones más complejas llegaban como destino final para su solución definitiva, en resumen, Synco buscaba resumir los eventos en cada uno los procesos, informarlos en línea (¿De ahí extraería su concepto de TOPS Riaz Khadem el “Infoman”?) y proporcionar simuladores y termómetros, de ésta manera era posible actuar con ventaja sobre los eventos antes de que éstos sucedieran y tener una visión a largo plazo no sólo de como los eventos sucederían, sino de como la gente reaccionaría, debió sonar profundamente descabellado en su tiempo, hoy en día parece que hablamos de como Facebook o Amazon nos sugieren opciones de compra, mediante un concentrado de nuestras actividades, gustos e intereses, buscando a través de algoritmos patrones similares y sugiriendo las acciones ejecutadas por agentes parecidos a nosotros, de ésta forma un poco escalofriante, se consigue no controlar un mercado, sino entenderlo más a fondo, sacarle provecho y usarlo para un determinado propósito, difícil pensar en “controlar” si consideramos que la última decisión es nuestra, pero la posibilidad de influir es grande.

Se dice que todo este proyecto fue eliminado tras el golpe de estado ejercido por Augusto Pinochet con apoyo externo, y de ahí, en las ruinas de un proyecto se alzaría otro experimento más, en otra dirección, pero esa es otra historia, tal vez Hayek y Friedman hubiesen sentido mucho interés por la maquina de Beer y Allende, incluso hasta Keynes, ¿Quién no?