OFF!-OFF!

Para los idiotas que luego de ver la película de los Avengers, se preguntan: “Pero si el Capitán América luchó en la segunda guerra mundial, como vino a dar a nuestros tiempos y no tener 90 años”, la respuesta es fácil si tienen  la imaginación de el creador del universo Marvel, Stan Lee, El Capitán América (el más grande fascista de todos los tiempos, por cierto) estuvo congelado en un bloque de hielo por décadas, hasta que una tribu de esquimales lo rescataron y lo veneraban como su dios, eso hasta que el príncipe Namor, uno de los personajes más “cul” de Marvel, molesto rompió el bloque con sus puños y lo liberó, y porque les digo esto? Pues porque precisamente el hardcore punk de los OFF! Suena precisamente al Capitán América siendo liberado de un bloque de hielo luego de décadas de suspensión, Keith Morris (el verdadero super punk, no John Lydon), sigue más vivo y furioso que nunca, a sus casi 60 años, este cuate con más achaques que un abuelo y con unas rastas bastante “cul” para ser punk, sigue tan lleno de energía y rabia como esos días en que estaba al frente de los Black Flag y cantaba Wasted.

Y luego de escuchar Wiped Out, de este disco homónimo de la más reciente banda de Morris, me viene a la mente una de las ideas más locas e interesantes que me han surgido, que tal si Ozzy, luego de dejar a los Sabbath a finales de los 80s se hubiera ido a California, le hubiera tocado el estallido inicial del hardcore punk californiano, y se hubiera puesto al frente de alguna banda como los Black Flag, el resultado hubiese sido monumental, después de todo, los hardcore punks amaban a Sabbath y a los Wire por igual, mucha de esa energía primitiva del hardcore punk, era la misma que infestaba esos primeros y clasiquísimos discos de los Sabbath, en mi mundo pudo suceder y Ozzy sería el doble de legendario de lo que es ahora, que en tan decadente estado se encuentra (como todo el heavy metal).

Pero regresemos a Morris, quien se encuentra en brillante compañía, con piezas como Wrong, dónde aparte de deshacerse la garganta, es respaldado por un grupo de verdaderos forajidos y amantes del hardcore, capaces de dar un impulso y una energía inusitada a Morris, como en Borrow and Bomb, dónde el espíritu de esos primeros Black Flag es soberbiamente invocado y revivido nuevamente, o en Toxic Box, dónde sin duda, la magia de aquella vieja (ahora) y alguna vez excitante escena de Hermosa Beach pareciera nunca haberse ido y seguir aquí, una cosa es segura, Morris y compañía no están trayéndonos nada nuevo, ni realizando un gran descubrimiento, pero están ejecutando una operación que en la mente resulta difícil de materializar, traer nuevamente esa vieja y violenta energía de la época de oro del hardcore estadohundidense, esa joya de genero que transformó la música en los 80s, y esto no es un mero revival, sino una re configuración, con un legendario y temerario Morris al frente, que no duda en reconocer la influencia de los monolíticos y simplistas riffs de Iommi y los ritmos y combinaciones sónicas de los Wire, piezas fundamentales para bandas como los Black Flag, o los Cicle Jerks (ambas, alguna vez con Morris al frente) de ahí la importancia alta y precisa de este nuevo disco en la carrera de un verdadero pionero de la violencia y el caos, acaso el mundo, o por lo menos el vecino país del norte se está acercando a una nueva era de turbulencia, como la que les recetó Reagan, turbulencia capaz de traer a la vida música tan llena de energía.

OFF! Es sin duda una muestra más de los tiempos difíciles que vivimos, dónde los recuerdos de opresión y codicia que afectaban a los pueblos de este mundo se alzaron y pusieron a muchos jóvenes a manifestarse y gritar lo más fuerte posible contra el sistema, así suenan las guitarras de este disco, como banderas para llevar y alzar, se ha llegado el momento en que enfrentemos fuego con más fuego, bienvenido y no te vayas Morris, yo en verdad, quisiera escuchar a esos peleles que se dicen punk rockers, quitarse el sombrero ante Morris, les apuesto a que muchos ni sabrán quien es, POSERS!.