James Williamson and the Pink Hearts, Behind The Shade (2018)


James Williamson and the Pink Hearts, Behind The Shade (2018)

Por: Erreh Svaia

Rock N Roll Animal

James Williamson seguramente es uno de mis guitarristas favoritos, poseedor de una técnica salvaje, pero sobresaliente, fue protagonista indiscutible de uno de los discos más emblemáticos de la que es posiblemente la mejor banda de rock n roll de la historia, el Raw Power de los Stooges, y decir esto no es nada fácil si consideramos que los Stooges ya habían hecho un disco legendario, el Fun House, adicional a esto, ponerse frente a frente con un maniático del escenario como Iggy Pop no es cosa fácil, en el caso de Williamson es palpable su impresionante dominio de la guitarra y su total afinidad a esa locura llamada los Stooges.

Semi retirado por décadas, Williamson pasó de producir algunos discos (el New Values y el Soldier, oscuros discos de Iggy Pop) y después a convertirse en gurú computacional en Silicon Valley, pero como suelen decir: “los malos hábitos son difíciles de aniquilar”, y Williamson regresó a su guitarra y a los Stooges en un soberbio disco de retorno titulado Ready To Die, pero la historia de Willamson el músico, no termina ahí, y ahora continua con una nueva banda que resulta tan sorprendente como la misma carrera de James, considerando que Petra Haden, la hija del legendario bajista de Ornette Coleman (uno de los pioneros del free jazz), Charlie Haden, ésta presente aquí, Haden no es ajena a la experimentación, y grabó ella sola un disco completo versionando el “Selll Out” de los poderosos Who, con su voz como único instrumento, aquí Haden se inclina más por el violín, su instrumento favorito, aunque claro que toma el micrófono con total convicción en varias piezas.

James Williamson and the Pink Hearts es la nueva aventura en conjunto de Williamson y de Haden, con ello también aparece el cantante y guitarrista Frank Meyer, procedente de la banda punk de LA Streetwalkin´ Cheetahs, que ya con el nombre nos dice bastante, originalmente cuando supe del disco, la palabra “Americana” me fue mencionada como referencia, cabe mencionar que Behind the Shade poco tiene que ver con la música folclórica estadounidense, y pareciera relacionarse un poco más con los instintos proto punk de Williamson, y uno que otro guiño a la música country.

El primer tema, Riot on the Strip, de entrada sorprende con su mezcla de los New York Dolls y los Stooges gracias a la desafiante actitud y ejecución de Meyer y las guitarras punzo cortantes de Williamson, quien también grabó parte de las líneas de bajo, Williamson consolida su reputación original como un monstruo incendiario capaz de tocar de una forma apasionada como pocos, para Judith Christ, la banda reduce un poco su furia y nos trae un tema que pareciera un guiño muy marcado al tremendo Van Morrison, con un Meyer revelándose como toda una promesa vocal.

Para Pink Hearts Across the Sky, Haden comienza a tomar la iniciativa, el tema muestra algunas partes que parecieran reflejar a esos Stones en su época de fascinación por Gram Parsons y el country rock, “American Cosmic Music”, si, eso bien podría describir el duelo de sonidos intercambiados por Haden y Williamson, mientras que para You Send Me Down hay un regreso al rock n roll más crudo nuevamente de la mano del genial Meyer y de Haden.

Existen algunos temas en los que tanto Williamson, Haden y Meyer se permiten algo de experimentación, Purple Moon es un buen ejemplo de esto, en donde también queda de manifiesto la aportación del baterista Michael Urbano, o Miss Misery, con un Williamson más inclinado por lo acústico, haciendo compañía a Meyer y a Haden, mientras que para Revolution Stomp, la banda se pone las pilas y nos deleita con un ataque feroz del más inspirado rock n roll.

La banda nuevamente se pone al borde del precipicio con el tema que da nombre al disco, un osado experimento y verdadero “tour de forcé” que sale bien librado, aunque deja a la audiencia deseando tal vez un mejor final, algo tal vez más “upbeat” en lugar de la opresiva y un tanto decadente Died a Little Today, con una Haden como protagonista en una bella pero oscura y gótica pieza. 

Behind the Shade es un disco sobresaliente aún para los que quisiéramos escuchar a Williamson junto a Pop, la guitarra sagrada de Williamson sigue inmaculada y consigue conjuntarse de manera brillante con el áspero violín y angelical voz de Haden, además de la enérgica participación de Meyer, una grata sorpresa y una apuesta prodigiosa por parte de un veterano que se niega a repetirse, a estancarse y que parece gozar con los retos y riesgos de esta nueva aventura, un deleite.

   

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