Mala-Mala In Cuba

Cuando haces algo tremendamente original tres cosas suceden, la primera es que eres virtualmente ignorado en el primer momento, te juzgarían loco, te ignorarán y la gente hará hasta lo imposible por que lo que haces no salga a ala luz, la gente teme lo que no entiende o no puede comprender, la segunda es que de todas maneras alguien con la mente suficientemente abierta y con el suficiente respeto de las masas lo escuchará, lo entenderá o hará como que lo entiende y lo transmitirá a los demás, quienes lo aceptarán sin cuestionamiento dado que esta segunda fuente les es conocida para ellos y  acto tercero las masas lo aceptarán, sin haberlo entendido, lo replicarán y el resultado final distará mucho de la visión original de su creador, triste pero cierto.

Pero hay un poco de justicia en este mundo, aunque no lo crean, el creador puede crear las veces que quiera, cambiar las reglas del juego, seguir ignorando al mundo que los ignora, con suerte y algún día será reconocido, aunque pase tiempo de por medio.

Algo así pasó con Mala, quien junto con Coki son casi enteramente responsables de traer a la vida el llamado dubstep cuando formaban el dueto de los Digital Mystikz, que paso casi desapercibido para muchos en el mainstream, pero que terminó dejando su huella en la escena underground inglesa, tristemente el dubstep se terminaría colando poco a poco en el gusto de las masas, atravesaría el océano y se convertiría en un curioso fenómeno en los estamos hundidos de amnésica, muy alejado, hay que decirlo de su concepto original, ya saben, en Amnésica todo es doble moral, aquí el machismo es lo que impera, así que para aceptar la delicadeza inglesa, hay que pasarla siempre por esteroides, como se hizo con el punk, el post punk y el techno, y aunque no me resulta del todo despreciable el extraño hibrido del dubstep surgido en los estamos hundidos de amnésica, hay que aclarar que muy poco tiene que ver con el sonido originalmente desarrollado por Mala y por Coki.

Ahora bien Mala se separa un poco, o bastante de la escena inglesa, se retira a deambular por La Habana, Cuba y a riesgo que muchos piensan que ande buscando hacer su propio Buenavista Social Club, Mala posee el suficiente talento para reinventarse y crear algo que destile originalidad por doquier, el resultado es este Mala In Cuba, disco dónde el productor ingles sin duda re imagina la música cubana y nos da enterada a un nuevo mundo sonoro y obviamente un nuevo capitulo musical, de la mano del dubstep y en plena colisión con los sonidos de la isla caribeña.

Mulata introduce cubanísimas líneas de piano, al tiempo que Mala se encarga de transformar las percusiones bajo la magia del dubstep, sendos bajos se asoman y amenazan aunque no se convierten aquí en la fuera predominante que si ejerce la percusión, mala ha encontrado una nueva fuente de agresión, no tan directa y más infecciosa, los arreglos llenan el lugar de espacios y vibraciones, dub habanero, si, podría ser.

Tribal arranca de la misma forma, con acentos atmosféricos, con inquietas percusiones y esos golpes de piano que parecieran extenderse eternamente, el sonido es por demás dinámico gracias a la influencia de la música nativa y se aleja del letargo y la oscuridad que algunas veces rodean el dubstep, Changuito posee una poderosa percusión base y una inquieta por encima, los bajos crujen de manera potente y Mala nos proporciona un intenso golpeteo rítmico, y en Revolution aún se anima a introducir los fantasmas que suelen deambular en sus producciones inglesas, esos que murmuran palabras del pasado y que aquí parecieran danzar al ritmo del tambor tribal, al igual que hace con Como Como.

Mala no hace dubstep en este disco, ciertamente añade ciertos sonidos a la instrumentación nativa de Cuba y de esta manera ofrece una personal interpretación de los sonidos de la isla, su visión sale adelante y sale bien librada, proporcionándonos un original e interesante disco, disco que sin duda se convertirá en un pilar para más cosas por venir más adelante!