The Orb, Featuring Lee Scratch Perry-The Observer In The Star House

Este es un mundo raro, bastante raro, en los 70s, era la música que Lee Perry producía, la que nos dejaba con la boca abierta, sus habilidades en la mesa de mezcla de sus legendarios estudios Black Ark, inspiró a muchos músicos a usar el estudio como instrumento de composición, dio en parte el banderazo al fenómeno conocido como música dub y cambio el mundo de la producción musical para siempre, sería hasta finales de los 70s, en que Perry, buscando expandir su carrera se atrevería a fungir como MC en sus propias grabaciones y fue así como Perry pasó de ser un espectacular productor a un artista más, que si bien, no fue del todo malo, ya que la leyenda de Perry es monumental y difícil de destruir, es un hecho que su reputación se vio un poco mermada, sobre todo en sus presentaciones en vivo, dónde sus prodigiosas producciones eran difíciles de recrear y su poca lucidez en el micrófono por tanta hierba era imposible de ocultar, pero como ya he señalado, su leyenda sigue pesando más y sería a través de colaboraciones que Perry empezaría a sumar nuevamente a su persona, gente como Los Clash o los Beastie Boys revivirían el nombre de Perry en sus producciones y gente como Adrian Sherwood o Andrew WK colaborarían en el estudio con discos que si bien, no eran joyas a la altura de sus grandes producciones de los setentas, daban a Perry una muy decente presencia ante las nuevas generaciones.

 Todo lo anterior nos lleva directamente a este The Observer In The Star House, disco en colaboración con los músicos electrónicos ingleses de The Orb, maestros de la electrónica y el alucine espacial que han grabado incluso con el buen David Gilmour de los Pink Floyd.

The Observer In The Star House sorprendentemente es un excelente disco que encuentra a ambos participantes en excelentes condiciones, a unos The Orb en total referencia al mundo de dub, sin caer mucho en el lado reggae, claro, con una producción que aún así añade suficiente ritmo y ecos para que Perry encuentre la base apropiada para liberar algunas de sus bizarras letras, decir que Perry es un cantante o letrista sería ir demasiado lejos, pero bueno, lo mismo podríamos decir de Mark E. Smith, un seguidor de Perry y líder de los The Fall que en muchas ocasiones ha hablado de Perry como una de sus grandes influencias (al grado que ha versionado alguna pieza de Perry), por los que podríamos asumir que el papel de Perry aquí es parecido al de Smith con los de The Fall, su principal trabajo aquí es el de avivar el fuego, y miren que en verdad Perry resulta altamente efectivo en esta grabación, Ball Of Fire siendo la primera gran muestra de un Perry que toma el micrófono y comienza a expandir sus alucinado evangelio musical, con unos The Orb tras el, siguiéndole el paso en todo momento, H.O.O. encuentra a este par inmersos en una densa jungla de sonido, con la voz de Perry como nuestro único guía en esta oscura e impenetrable espesura de sonidos, dejándonos claro que tanto como Perry como los The Orb se la pasaron bastante bien creando estas grabaciones, con un muy admirable Soulman, en dónde Perry nos asombra con su trabajo vocal, en verdad alucinante y con los The Orb reforzando los arreglos agregando secciones verdaderamente funkys en una pieza que se convierte en lava pura y ardiente.

Perry y The Orb llegan a un alto grado de idiosincrasia cuando se enfrentan al clásico de Junior Murphy, Policie And Thieves (tema bastante memorable que Perry produjo originalmente) y que más de uno se llevará las manos a la cabeza pensando que Perry ha cometido una barbaridad con uno de los temas clásicos del genero, pues les digo que no hay nada que temer, ya que tanto los The Orb sacan con aplomo la tarea, como Perry rata con respeto y valor el tema, redondeando un disco que inesperadamente nos trae muchos, muchos buenos momentos y que definitivamente refuerza muy gratamente la discografía reciente de estos dos grandes héroes de la música de vanguardia.