Tiranías Digitales
Tiranías Digitales
Por: Erreh Svaia
Dispersión Caprina
Lejos de la debacle financiera del 2008, que puso en jaque
al entonces prevaleciente liberalismo, lo que pone en serias dudas su futuro
son los avances tecnológicos, principalmente la Inteligencia Artificial (IA),
para el liberalismo la cuestión del libre albedrío sigue siendo sobreestimada,
a la vez que la IA se vuelve cada vez mejor para determinar las mejores
opciones acorde a las necesidades, nuestra capacidad de decidir empezará
irremediablemente a decaer como un músculo atrofiado por la falta de uso.
A medida que vamos analizando como tomamos nuestras
decisiones, más basados en sentimientos en lugar de en razones fundamentadas,
como lo hemos comprobado ampliamente durante eventos como el triunfo de SYRIZA
en Grecia, el Brexit, el triunfo de Donald Trump en los EEUU o el triunfo de
Andrés López en México, seguimos preguntando a la gente ¿Cómo se siente? ¿Qué opina?
En lugar de preguntarle ¡Qué sabe acerca de? ¿O que piensa de?, se siguen
utilizando referéndums para manipular las opiniones de la gente y seguir
desacreditando el factor racional, y es esa precisamente la debilidad más fuerte
del liberalismo actualmente, el libre albedrío ya no parece ser tan libre y
parece estar sujeto a la manipulación y en total renunciamiento hacia el
raciocinio.
El Liberalismo entrará en una encrucijada, cuya decisión
final parece más difícil que la que les viene a los regímenes autoritarios,
probablemente el régimen autoritario más avanzado en la actualidad, China, ya
ha tomado su propia decisión enfilándose hacia un capitalismo salvaje de estado
soportado por una dictadura digital en desarrollo, cerrando opciones a su
población y encaminándolos a la obediencia
total, la KGB o el Gulag moderno serán las versiones propias del Google, Amazon
y Facebook chinos, vigilando y controlando cada aspecto de la vida civil y en
caso de disidencia condenando al infractor al destierro fuera de línea y a
vivir fuera del sistema sin ningún derecho.
Para el Liberalismo le tocará analizar cómo se adaptará a
ésta nueva realidad en la que las emociones que en algún momento exaltó, ahora nos
podrían llevar a la debacle y en la que la IA a base de algoritmos se encarará
de tomar las mejores decisiones por nosotros, la velocidad de reacción y la rápida
capacidad de actualizarse es indudable que superará por mucho a nuestras
propias capacidades de racionamiento, llegará un momento en que sin duda a
través de algoritmos sabremos quienes son los mejores candidatos para
determinados puestos de trabajo en incluso a la presidencia de un país como
primer paso, y en segundo, como “asesor” para las mejores y más transparentes decisiones
de gobierno.
Para el Liberalismo el dilema consiste en preguntarse si está dispuesto a ceder ese "libre albedrío" que tanto daño a causado últimamente y como aprovecharlo, el resultado podría finalmente ser mayor transparencia, productividad y el adelgazamiento del Estado, para el Autoritarismo la decisión es más sencilla, implica someterse a un nuevos estilo de poder impuesto, de una sustitución del "culto a la personalidad, hacia un "culto a la tecnología", aunque el sometimiento sería de forma similar a como se da hoy en día, igual o más brutal.
La Inteligencia Artificial se perfila como lo más parecido a
lo que podía ser la verdadera Cuarta Ideología después del Fascismo, el
Comunismo y el Liberalismo, en éstas que parecieran ser las últimas etapas del
Liberalismo 2.0, ante el embate de las nuevas dictaduras posmodernas como Rusia
o Turquía, queda en manos del ser humano decidir ¿Que tan libre podrá ser al
permitir a la IA tomar las mejores decisiones por él?, ¿Qué tan libre se sentirá
poniendo su existencia en manos de algoritmos que le digan que hacer?, ¿Será
una nueva clase de “liberación”, o el principio de una suerte de dictadura digital?,
¿El Liberalismo podrá adaptarse a los tiempos que se vienen o perderá la
carrera ante el totalitarismo digital que se empieza a asomar?
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