Bad Brains- Into The Future (2012)

Bad Brains- Into The Future (2012)

A la carga regresan los Bad Brains bendecidos con su alineación clásica, lo cual resulta extraño ya que después de la reseña de los The Evens, regresamos a otra banda de la escena de Washington DC, interesante no? No por nada esa alguna vez fue una de las escenas más importantes del vecino país del norte y sería precisamente HR, vocalista de estos BB, quien aconsejaría a Ian MacKaye a buscar una dirección positiva dentro de la música y dentro de su vida, pues vaya amigos que tenía MacKaye y vaya influencia, aunque si hacemos un poco de memoria, HR era bastante acelerado décadas atrás.

Si Build A Nation parecía un gran esfuerzo por reconstruir a la legendaria banda (con apoyo del desaparecido MCA, si el difunto Beastie Boy, gran fan de la banda, fungiendo ahí como productor), Into The Future continua con esta tendencia a toda velocidad, y prueba de ello es el tema que da nombre al disco, un tema con un brillante ritmo, que aunque intenso no alcanza el frenesí hardcore que solía mostrar el grupo, no es un mal tema, pero muestra a unos Bad Brains más preocupados por las cuestiones técnicas que por la fiereza del momento, así mismo HR suena más relajado y menos maniático, lo cual no resta, definitivamente no, pero queda un poco debajo de los mejores esfuerzos del grupo, la guitarra de Dr Know siempre ha sido un instrumento letal, aunque aquí no brilla como en el siguiente tema, Popcorn, en dónde las guitarras rugen más furiosas y HR consigue esos alucinantes mantras del pasado, un tema sólido y audaz que luego de escuchar las vocales de HR nos damos cuenta de dónde provino el estilo vocal de Anthony Kiedis de los Chilli Peppers o del GRAN Mike Patton.

We Belong Together nos remite a la demoníaca velocidad de antaño, los Bad Brains haciendo nuevamente hardcore, con ese toque rasta que solo ellos saben hacer, con un HR armado con la Biblia y con una pistola, como el profeta maniaco que es, y los ritmos machacantes de Darryl y el buen Earl, que repiten el alucinante dinamismo en Youth Of Today, algo pasa con las guitarras que parecieran ser controladas o demasiado pulidas, lo cual resta poder al grupo, anteriormente el sonido resultaba un tanto más curdo y añadía intensidad, hoy eso trabaja un poco en contra del grupo, quienes suenan mas profesionales, pero menos espontáneos, anteriormente nos mantenían al filo del asiento sorprendiéndonos con cada movimiento, hoy parece que los podemos anticipar, aún así, la desviación al reggae a la mitad del tema complace, aunque suene un tanto forzada, como en el sin sentido de Rubadub Love.

Yes I es probablemente lo más parecido en el disco al pulverizante pasado del pasado, la banda a tope de sus capacidades, sonando tan peligrosos como antaño que tanto les disfrutábamos, con un Dr Know poderoso y un HR maniático a más no poder, como en sus mejores tiempos, repitiendo la portententosa formula en Suck Sess, dónde HR lleva su alucine a niveles extremos.

El lado de reggae alucinante de los Bad Brains sale a la luz en buena forma con Jah Love, en donde HR brilla y la banda muestra un lado más moderno de esta faceta, cuya volátil mezcla quebró al grupo en el pasado, pero que hoy suenan confortables al llevarla a cabo, y ni que decir de las monstruosas guitarras que acompañan a HR en Earnest Love, de lo mas desmadroso que habremos de escuchar en este fin de año, con la banda metiendo el pedal de la intensidad y la tensión al máximo.

Pareciese que rumbo al final del disco la banda suene completamente revitalizada y atreviéndose a algunos experimentos menores como en Come Down, repleta de inusuales quiebres musicales y voraces guitarras, o en la más ligera y dinámica Fun, dónde la banda nos invita a relajarnos y divertirnos entre vertiginosos ritmos y punzantes guitarras, vaya idea de la diversión!

El disco cierra con fuerte inclinación al reggae y al dub, lo cual es bueno ya que da el equilibrio esquizoide que siempre ha buscado la banda, y cierran así un disco que termina por encima del promedio, como una buena adición a su catalogo,  la banda no suena tan ruidosa, tan rápida o tan peligrosa como antaño, pero consiguen mantener un nivel bastante admirable de intensidad, ya no sorprenden como antes, pero continúan siendo tan capaces y animados como antes, la leyenda continua latiendo.