David Maranha + Z'ev-Obsidiana

Obsidiana es la grabación en vivo resultante de la colaboración de dos poco conocidos, pero no por ello poco interesantes personajes, Zev, reconocido percusionista que en lo particular puedo decir que he disfrutado mucho su colaboración con Stepehn O Malley de los Sunn O))), y como no, O Malley en incontables ocasiones se ha reconocido como seguidor de la música industrial y por otro lado Zev, cuyo nombre real es Stefan Joel Weisser es un artesano de los metales, constructor de un sin fin de instrumentos y artefactos musicales de metal que utiliza para crear opresivos sonidos que le han valido ser calificado como uno de los primeros músicos dentro del genero de la música industrial.

Por otro lado tenemos a David Maranha, músico de inclinaciones minimalistas y de trabajos muy interesantes dentro del mundo del drone, y es precisamente los continuos zumbidos de los artefactos musicales de Maranha, los cuales proporcionan la base principal sobre la cual este Obsidiana se construye, Maranha aplica la sabiduría aprendida de maestros minimalistas como Henry Flynt, John Cale o Tony Conrad, lo aplica de manera apabullante e incesante, mantiene ese sonido penetrante hasta sus últimas consecuencias, creando una onda de sonido única que termina golpeándonos y envolviéndonos a la vez, al tiempo que Zev divide su tiempo entre esos platos de metal que hacer golpeados generan laceraciones auditivas y sus tambores más graves, los cuales invitan a la tribu a danzar alrededor del fuego y porque no? A saltar hacia él.

Obsidiana transcurre de manera memorable entre ambos músicos, estableciendo un continuo dialogo entre ambos que se extiende por poco más de 35 minutos, con un Maranha aplicando poderes mentales capaces de mantener la tensión y de crear poderosas ondas de sonido, al tiempo que Zev le rompe los huesos a más de uno con esos brutales golpes a sus instrumentos, ambos van creando una sucesión de interesantes participaciones en un plan totalmente adentrado en el rollo del drone, castigándonos, oprimiéndonos, dominando el sonido en ocasiones aflojando un poco el collar de la bestia y otras jalando duramente la correa para tensar aún más el momento.

Zev y David crean de la mano un mundo oscuro, salvaje y primitivo dónde se respira el miedo, Zev, como siempre, suena enorme, masivo, sus percusiones adquieren un tamaño gigantesco, titánico, que impone una mezcla de miedo y de respeto, mientras David trata de hipnotizarnos, de hacernos caer en el trance de sus ondas sonoras repetitivas e interminables en un ejercicio de puro poder bruto.

Zev, ya sea en solitario o con acompañantes de este calibre sigue presentando obras importantes, con un peso incalculables que solamente dan una mayor contundencia y valor a su leyenda, fans del drone, fans de los primeros trabajos de John Cale con La Monte Young, fans de los Dharma Warriors de Henry Flynt y fans de Faust, aquí hay algo que de seguro les encantará.


Comments

Popular Posts