Prurient-Wrapped In the Flame Of Illusion, Masked In The Clay Of Behavior

Si hablamos de noise, sin duda alguna Prurient es uno de mis grupos favoritos, Dominick Fernow ha logrado llevar a cabo una trayectoria que en ningun momento ha bajado la guardia y que continúa dándonos discos lo suficientemente buenos para mantener el interés, tan sólo basta recordar el genial Bermuda Drain del año pasado, dónde sin duda, Fernow aplicó a su música la influencia de los Cold Cave, con quienes ha estado de gira recientemente, una nueva versión de los Prurient dónde los sintetizadores desplazan el feedback, dónde Fernow añade nuevos elementos “melódicos” por decirlo de alguna manera, dejando muy en claro su deseo de escapar de cualquier paradigma del genero, de re definir el noise como un estilo libre, sin limitaciones, situándose de esta manera como uno de los actos más vanguardistas del genero.

Previo a su Bermuda Drain, Fernow estuvo experimentado con diversas direcciones musicales, buscando la manera de llevar sus power electronics, aprendidos de bandas como Whitehouse, a un nuevo nivel, y es precisamente ahí, que este disco tiene su origen, Fernow agregando nuevos matices, haciendo a un lado el feedback y suscribiéndose a las ilimitadas posibilidades atmosféricas del drone.

God Is The Truth And Light His Shadow abre este Wrapped In the Flame Of Illusion, Masked In The Clay Of Behavior (título bastante poético por cierto) un tema extravagante, muy en la excéntrica escuela del drone, un territorio visitado alguna vez por gente como los Skaters, escuchamos cintas de conversaciones grabadas por Fernow, las cuales parecieran estar sumergidas en medio de la oscura y tenebrosa atmósfera que poco a poco se va generando, más una historia de terror que una canción, Fernow demuestra ser un experto en crear estados de animo, sensaciones bizarras y atmósferas perversas y decadentes, alejándose bastante de lo que muchos consideran estrictamente noise.

God Is True And Every Man A Liar (otro de eso títulos épicos que parecen deleitar últimamente a Fernow) inicia de igual manera, con un sintetizador marcando notas largas y zumbantes, el drone a la orden del día, aun que en este tema, la cerrada abstracción del tema anterior pareciese disiparse, esta pieza pareciese abrirse como nubes destripadas por rayos de sol, aunque es un amanecer aterrador, con sonidos amenazantes en todo momento, God Is The Truth, The Way, And The Light, continua con el fervor religioso en los títulos, pero presenta a diferencia de los temas anteriores un ritmo constante, repetitivo, como latidos de corazón, una pieza que va evolucionando, que mezcla sintetizadores en plan ambient con ese ritmo primitivo y agresor, una marcha grotesca y oscura, en dónde es posible escuchar incluso, algo de guitarras al fondo.

El disco finalmente cierra con una cuarta composición, Judgement To The World, probablemente el tema más accesible de los cuatro, con una guitarra que genera unos ecos que viajan una larga distancia, unas notas que se repiten una y otra vez y se someten a mínimas variaciones, mostrando facetas del sonido Prurient que no habíamos tenido oportunidad de escuchar antes, que son una muestra fehaciente del estado evolutivo en que se encontraba Fernow en esos momentos, mutando a su Prurient de una bestia primitiva y salvaje, ha una maquina de destrucción programada, pasando por esta momentánea etapa de experimentación abierta, dónde el mismo se permite tomar un sin fin de oportunidades, mostrando el abierto estado mental en que se encuentra, buscando nuevos elementos para seguir evolucionando, y sorprendiendo como ya lo ha hecho, el disco más variado de Prurient hasta el momento, un disco que podría caer dentro del espectro del noise, pero que sin duda absorbe influencia masiva del ambient y del drone.